Anssumane Fati fue comparado con Leo Messi desde que irrumpió en la élite. Aunque no se parecían en nada, en el Barça quedaron asombrados con su irrupción, y debido a su talento, su potencial y su demarcación, poco tardó el internacional español en ser considerado como el sucesor del astro argentino. Pero las trayectorias de ambos no tienen ningún parecido, ya que los problemas físicos han provocado que el delantero nacido en el año 2002 se quede por el camino.

Ya hace prácticamente tres años desde que sufrió esa grave lesión en la rodilla que ha hecho que jamás vuelva a ser el mismo. Y pese a que siempre ha contado con el apoyo de la afición, no ha podido recuperarse al 100%. Ni siquiera el hecho de que le dejaran heredar el dorsal ‘10’ que quedó libre cuando el campeón del Mundial de Qatar se fue al Paris Saint-Germain sirvió para que recuperara su mejor versión, y ha sido suplente habitual para Xavi Hernández.

En la pretemporada dejó muy buenas sensaciones, y se esperaba que consiguiera entrar en los planes del entrenador catalán. Marcó varios goles y realizó actuaciones destacadas. Y con la venta de Ousmane Dembélé al Parque de los Príncipes, se abría una oportunidad para que el ex del Sevilla pudiera hacerse espacio en el once inicial. Nada más lejos de la realidad, ya que ante el Getafe fue suplente, y entró a falta de 10 minutos para el final.

Ni siquiera el empate a cero que reflejaba el marcador sirvió para que Ansu pudiera ingresar antes al terreno de juego, y Ez Abde o Lamine Yamal saltaron al césped antes que él. Una muestra de lo que le espera en el Barça en el presente curso en caso de que no haga las maletas. Y su situación se puede poner aún más complicada en caso de que firmen a un nuevo delantero, que es la intención de Joan Laporta. Además, en enero aterrizará Vitor Roque desde el Atlético Paranaense.

Xavi no tendrá piedad con Fati, y por mucho que en su momento fuera considerado como ‘el nuevo Messi’, le enseñará la puerta de salida.

Ansu dejará el Barça si llega una oferta de 60 millones de euros

Todavía no hay nada cerrado con ningún club, pero en caso de que llegue una oferta de 60 millones de euros, Laporta y Mateu Alemany le abrirán las puertas a Fati, que puede ser el último ‘sacrificio’ que el Barça realice este año.

Con su marcha, podrían inscribir a los cracks que aún no han podido ser registrados en La Liga, y quedaría dinero para realizar alguna contratación.