Después de varias semanas/meses en las que no se ha hablado de otra cosa, el shoufflé del fichaje de Leo Messi por el Inter Miami ha bajado. Y también el de las incorporaciones de Jordi Alba y Sergio Busquets al conjunto norteamericano. No obstante, se está cocinando una operación que, sin duda, devolvería al club presidido por David Beckham a lo más alto de la actualidad.
El pasado fin de semana se despidió otro grande. Luis Suárez dijo adiós a su afición en el Gremio. Y lo hizo de la mejor manera: marcando el gol que dio la victoria a los locales contra el Vasco de Gama. Al Gremio todavía le queda un partido, pero será en el campo del Fluminense, con lo que Luis Suárez tuvo su homenaje en su último partido como local. El delantero uruguayo puso así punto y final a su paso por la liga brasileña.

Suárez pone fin a su etapa en Sudamérica
A Suárez le ha costado recuperar la felicidad. Después de salir por la puerta de atrás en del FC Barcelona por discrepancias con el nefasto presidente Josep Maria Bartomeu y el técnico de entonces, Ronald Koeman, que le comunicó que no contaba con él en una llamada que duró menos de dos minutos, probó suerte en el Atlético. Pero pese a que firmó dos buenas temporadas y ganó una Liga, el Cholo Simeone pidió que no lo renovaran. Asimismo, tras cerrar su etapa en Europa algo convulsa en los últimos años, ha jugado en el Club Atlético Nacional y en el Gremio, donde se convirtió en el nuevo ídolo de sus aficiones y reencontró la sonrisa.
Ahora, a sus 37 años y tras encadenar algunas lesiones, son muchas las fuentes que han apuntado a una retirada. Sin embargo, el ariete podría vivir una última aventura al lado de Leo Messi en el Inter Miami.
Leo Messi quiere volver a jugar con Luis Suárez
Según apuntan algunos medios del continente americano, Messi ha pedido a Beckham que haga un esfuerzo por contratar a su íntimo amigo Luis Suárez. Una operación que aportaría calidad en el ataque, pero también repercusión a nivel mediático. Por un lado, el uruguayo ha sido el mejor aliado del argentino en el pasado y su entendimiento en el campo compensaría las carencias físicas de ambos. Por otro, pocas cosas centrarían tantas miradas como volver a ver juntos a Messi y Suárez sobre un terreno de juego.

Beckham, por su parte, habría aceptado mover ficha. Otra cosa es que el fichaje pueda cerrarse. Porque los sueldos están fijados en la Mayor League Soccer y sólo se permite pasarse de las cifras en tres jugadores. Tres puestos que ahora ocupan Messi, Alba y Busquets, con lo que Suárez debería aceptar un sueldo a la baja. Lo que está claro es que, en caso de conseguirlo, sería la bomba de enero.