Lamine Yamal se ha convertido en su primera temporada en una de las grandes estrellas del Barça. Las lesiones y la falta de jugadores de clase mundial han hecho que el joven extremo se haya ganado el puesto de titular. Junto a él, Fermín López o Pau Cubarsí también se han convertido en un miembro más de la plantilla de Xavi Hernández.
Pero hubo una época en la que no era tan fácil despuntar siendo joven. Con jugadores como Leo Messi, Gerard Piqué o el propio Xavi en el primer equipo, los jóvenes que venían de la Masia o de otros clubes debían ser muy pacientes para esperar su oportunidad. Un requisito que no todos cumplieron y que les llevó a tener una carrera decepcionante, como el caso de Alen Halilovic.
Halilovic echa la vista atrás
El croata llegó al Barça en 2014 procedente del Dinamo de Zagreb a cambio de 5 millones de euros. Apodado como 'el Messi de los Balcanes', el centrocampista estaba llamado a ser uno de los nuevos talentos generacionales de Europa. Después de un solo año jugando en el filial blaugrana, en el que llegó a debutar con el primer equipo, Halilovic acabó cedido en el Sporting de Gijón.
"Hice buena temporada. Jugué casi todos los partidos, marqué goles, di asistencias...", afirmó el croata en una entrevista concedida a Marca esta semana. Sin embargo, en su retorno a Barcelona a final de curso, el jugador ya quería dar el paso al primer equipo, al contrario de lo que pensaba el club. "Tenía que haber escuchado al Barça y seguir (cedido) en LaLiga. Sin embargo, yo sentía que estaba preparado para jugar en el primer equipo del Barcelona y decidí irme fuera. Si pudiera cambiar algo en mi carrera, sería haber seguido en España", reconoce el futbolista, ocho años después de esa decisión.
Una carrera sin rumbo
Fue entonces cuando acabó marchándose traspasado al Hamburgo, donde la mala situación deportiva del club le impidió formarse como debería. Tras solo media temporada, se fue cedido a la UD Las Palmas, donde recuperó las buenas sensaciones. Los dos goles y cuatro asistencias que hizo en el conjunto pajarito fueron motivo suficiente para el AC Milan para contratarle.
La falta de oportunidades le obligó a irse cedido al Standard de Lieja, iniciando una travesía por el desierto saltando de equipo en equipo. Después de cinco años en los que pasó por cinco clubes diferentes, y de empezar 2023 sin equipo, Halilovic encontró una nueva oportunidad en el Fortuna Sittard. Con 27 años, el croata ha vuelto a ser feliz jugando en la Eridivisie. Está cerca de igualar su mejor temporada anotadora con cinco goles y dos asistencias y ha estado incluido varias veces en el Equipo de la Semana. Ahora quiere volver a luchar por su sueño de jugar en la élite: "No quiero decir que estuve en Barça y Milan... y ya. Quiero volver a este escalón y demostrar que tengo calidad para jugar ahí", asegura Halilovic. Su objetivo es claro, volver a jugar en España y volver a ser convocado con Croacia.