En el Barça se ha abierto un frente inesperado y que duele especialmente por venir de un chico de la casa. Marc Casadó, uno de los mediocentros más prometedores de la Masia, se ha coenzado a hartar de todo. El joven no entiende su situación, no comprende la falta de confianza que Hansi Flick ha demostrado en él durante los últimos meses y ya ha transmitido al club que, si nada cambia, pedirá salir en verano para poder tener minutos reales y un proyecto que crea en él.

Casadó no entiende el cambio con Flick

Porque lo que está viviendo Casadó no tiene explicación lógica desde su punto de vista. Si bien es cierto que el Barça atraviesa un momento complicado, la realidad es que el mediocentro ha pasado de ser una pieza tenida en cuenta a convertirse en alguien completamente intrascendente. Y es que Flick, que en un principio parecía confiar en el talento y la disciplina del futbolista, ha dejado de incluirlo en sus planes de manera abrupta y sin explicación aparente.

Flick preocupació Bruges Barça Champions EFE

Y es que lo que ocurrió en Stamford Bridge ha sido casi definitivo. El partido ante el Chelsea era un escenario perfecto para que Casadó tuviera protagonismo, especialmente con el centro del campo sufriendo, desbordado y sin respuestas. Sin embargo, Flick ni siquiera lo consideró como opción. Casadó lo vivió como una señal inequívoca de que su entrenador ya no tiene ninguna fe en él, lo que ha generado una frustración enorme.

El mediocentro quiere un cambio real o una salida

De este modo, Casadó considera que está siendo tratado de forma injusta. Él se ha roto el alma entrenando, ha cumplido siempre con profesionalidad absoluta y ha demostrado estar preparado cada vez que le han dado minutos. Pero en su entorno aseguran que lo que más le duele no es no jugar, sino sentir que ya no existe ni la posibilidad.

Así pues, el mediocentro ya ha transmitido al club su postura: si no hay un cambio claro con Hansi Flick, pedirá salir. No quiere seguir así, estancado, sin minutos y sin un rol definido. Tiene ofertas, admiradores y equipos dispuestos a darle el protagonismo que en el Barça parece haber perdido de repente. El caso preocupa porque el club valora mucho a Casadó, pero también entienden que un jugador de su edad no puede permitirse pasar otro año sin oportunidades. El futuro del canterano dependerá directamente de si Flick está dispuesto a reabrir la puerta que él mismo cerró.