El Paris Saint-Germain está cocinando a fuego lento un nuevo ‘bombazo’ en el mercado estival. Después de haber reclutado a Marco Asensio, a Randal Kolo Muani, a Milan Skriniar, a Manuel Ugarte o a Gonçalo Ramos en el último verano, Luis Enrique todavía exige más incorporaciones galácticas a Nasser Al-Khelaïfi, independientemente de lo que suceda con Kylian Mbappé, quien finaliza contrato en el mes de junio, y sigue sin renovar ni resolver su futuro.

Desde el Parque de los Príncipes aún consideran que la plantilla tiene un considerable margen de mejora, y por ello se han fijado en un crack de clase mundial, por el cual están dispuestos a hacer una importante inversión económica. Estamos hablando de Kevin de Bruyne, quien se ha convertido en una obsesión para el entrenador asturiano, ya que cree que carecen de un futbolista que tenga visión de juego y que pueda romper las líneas defensivas de los rivales con sus precisos pases.

Kevin de Bruyne saliendo del campo del Burlney lesionado / Foto: EFE
Kevin de Bruyne/ Foto: EFE

No es ningún secreto que la medular es la zona más débil del conjunto francés, y quieren traer a un galáctico que acompañe al prometedor Warren Zaire-Emery en las labores de creación. Por ello han pensado en la estrella del Manchester City, uno de los mejores futbolistas del planeta en la actualidad, a pesar de que lleve lesionado unas cuantas semanas, y tenga muy difícil regresar a los terrenos de juego antes de 2024. Pero nadie duda de que seguirá siendo indiscutible para Pep Guardiola.

Sin duda, es fundamental en el Etihad Stadium, y tiene una conexión letal con Erling Braut Haaland, con el cual se entiende a las mil maravillas. Es uno de los ídolos de la afición, y uno de los cracks más importantes en los éxitos conseguidos recientemente, destacando el triplete del curso anterior. Pero el PSG amenaza la continuidad del mago belga en la Premier League, ya que Al-Khelaïfi está preparando una oferta sensacional para llevarlo a la Ligue1.

Está dispuesto a pagar todo lo que sea necesario para que los ‘skyblues’ le abran las puertas, y también para convencer a De Bruyne, a quien quiere convertir en uno de los mejores pagados del planeta.

Luis Enrique, obsesionado con De Bruyne

Todo se debe a la obsesión de Luis Enrique, que desea tener a De Bruyne a sus órdenes cueste lo que cueste. Ha colocado su nombre como un asunto prioritario, y obliga a Al-Khelaïfi a hacer todo lo posible para robárselo a Guardiola, y que salga del City después de casi una década.

¿Acabará recalando en el PSG?