Lamine Yamal ha crecido rápido. Demasiado rápido. A los 15 años ya debutaba. A los 16, era la nueva esperanza del barcelonismo. A los 18, el número 10 del Camp Nou. Todo ocurrió en un suspiro. Pero nadie ve lo que hay detrás. Lo que no sale en televisión. Lo que no aparece en los goles ni en los aplausos, y que el periodista Xavi Torres explicó en el "Què T’hi Jugues" de la cadena SER.
"La Masia salvó a Lamine Yamal. Así de claro. El Barça salvó a Lamine, porque cuando él tenía 12 años había perdido ciertos hábitos de estudio, de descanso, de nutrición... Él vivía con su madre en Granollers y los fines de semana los pasaba con su padre en Rocafonda. Pero el Barça no cogía, en esa época, niños de su edad, ni de Mataró. Por tanto, se tuvo que hacer una doble excepción que fomenta su representante del momento, Iván de la Peña, y a través de Jordi Roura, que era el máximo responsable técnico, del directivo Xavi Vilajoana y del director de la Masia, Xavi Martín, deciden que si realmente este niño era una apuesta del club, se debía hacer eso", explicó la fuente.
Una excepción que valió para tener al mejor jugador del mundo
Así, el Barça hizo la excepción. Le abrió las puertas. Lo llevó a La Masia. Y, según personas que participaron en esa decisión, fue un rescate deportivo y personal. Allí recuperó hábitos. Orden. Control. Supervisión. Y, sobre todo, un ambiente que le obligaba a seguir normas que él nunca había tenido. En palabras de los técnicos de aquella etapa, “el Barça salvó a Lamine”.
"Se rompen todas las normas, lo ponen dentro y tres años después debutaba con el primer equipo. Es un caso clarísimo de que el Barça salvó la carrera de Lamine. Es un caso clarísimo de que, gracias al Barça, este niño es lo que es. Desde que era pequeño ha vivido contra el sistema, se ha tenido que rebelar siempre. Ha vivido en la calle, ha tenido que espabilarse, las normas son diferentes a todas las que hemos tenido nosotros, en los colegios, con el padre, con los círculos familiares, en la escuela... Ha vivido en ambientes donde el sistema no da ninguna oportunidad a sus miembros y ha crecido así. Y ahora llegamos todos para decirle cómo lo tiene que hacer y de qué manera", relató Xavi Torres.
Hoy, Lamine Yamal es el ‘10’ del Barça, una de las mayores promesas del mundo y un jugador cuya madurez sorprende incluso a quienes saben lo que vivió. Una historia de superación que, conmocionados y sorprendidos, muchos de sus compañeros no conocían.