El FC Barcelona se enfrenta a una nueva situación complicada con uno de sus jugadores más importantes: Jules Koundé. El defensa francés, que ha sido una pieza clave tanto para Xavi Hernández como para el actual técnico Hansi Flick, ha iniciado una estrategia para forzar una renovación al alza que ha sorprendido incluso a los altos cargos del club.
A pesar de que desde el club no se planteaban una mejora salarial, Koundé y su entorno han comenzado a mover los hilos para poner presión. El jugador, que llegó desde el Sevilla FC en 2022 por una cifra cercana a los 50 millones de euros, considera que su evolución en el equipo y su polivalencia sobre el terreno de juego merecen una compensación económica acorde a su papel actual.

Koundé considera que se ha ganado una mejora salarial
Uno de los argumentos más sólidos que utiliza Koundé es su capacidad para rendir en posiciones fuera de su rol natural. Aunque llegó como central, ha asumido con profesionalismo y eficacia el rol de lateral derecho, una posición clave en el sistema del Barça. A ello se suma su protagonismo en momentos decisivos, como el gol en la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid, que selló el título para los azulgranas. Un tanto que confirma su entrega y sus capacidades, pese a llevar casi dos horas jugando.
Pero lo que ha generado inquietud en las oficinas del Camp Nou es que Koundé no está solo en su petición. Desde Inglaterra, concretamente el Arsenal de Mikel Arteta, han mostrado interés real por hacerse con sus servicios. Los gunners siguen al jugador desde hace tiempo y podrían presentar una oferta formal si la situación no se desbloquea pronto.

El Arsenal, la baza de Koundé para subirse el sueldo
Este interés externo y que Jules se deje querer no parecen casuales. Todo indica que es parte de una estrategia de presión bien diseñada por el entorno del futbolista para forzar al Barça a subir su ficha. Actualmente, Koundé percibe alrededor de 13,5 millones de euros brutos por temporada, lo que se traduce en poco más de 6 millones netos. Sin embargo, el defensor ha dejado claro que quiere alcanzar los 8 millones netos, una cifra que llevaría su salario bruto hasta los 16 millones anuales.
El problema es que el Barça no está en condiciones económicas de asumir muchas subidas salariales. La Liga y su estricto control financiero obligan al club a moverse con cautela. Cada euro cuenta, y cualquier mejora debe estar más que justificada.
Pese a esto, Hansi Flick ha transmitido su deseo de contar con Koundé a largo plazo. Lo considera fundamental para su proyecto, por su calidad táctica y su capacidad de adaptación. No obstante, Deco y el área económica tienen dudas sobre si es el momento adecuado para aceptar tales condiciones.