Jorge Mendes está preocupado. Hasta hace poco daba por hecho que el Barça iba a poner encima de la mesa los 30 millones de euros pactados para quedarse en propiedad a Adama Traoré, pero ahora parece que el club blaugrana tiene previsto cambiar de planes. Adama está jugando bien, pero los avances para renovar a Dembélé y el interés de Xavi de contar con Raphinha le cerrarían las puertas al extremo, que volvería a las filas del Wolves. Y no solo eso, pues Mendes tenía previsto incluir en la operación a Trincao, que está jugando cedido en Wolves, por lo que el portugués se quedaría a cambio de Adama y dinero.
Lo cierto es que el Barça no tiene ningún compromiso para quedarse a Adama, pues es una opción de compra no obligatoria, aunque Mendes no olvida que la cesión se produjo gracias a él, y en un momento en el que Xavi necesitaba refuerzos para la zona ofensiva.
Adama Traoré, en el partido del Camp Nou contra el Galatasaray / EFE
La decisión de Nico
El gran problema es que Jorge Mendes tiene los derechos de Ansu Fati, Alejandro Balde y Nico González, que hace poco anuncio el cambio de agente. El portugués no amenaza al Barça, pero sí que está moviendo algunos hilos para mover a Nico, que no está jugando con Xavi todo lo que esperaba. En el Barça ven a Nico como futuro Sergio Busquets, pero el buen momento del capitán blaugrana y la confianza plena de Xavi en él está alargando el cambio de galones.
La suerte para Nico es que su padre, el mítico Fran del Súperdepor, le está asesorando muy bien. "Yo de mi hijo poco puedo hablar, mejor que hable él que ya tiene edad para ello", ha afirmado en una entrevista al diario As. "Hay que ir quemando etapas, las prisas no son buenas. Soy de los que creo que hay que ir madurando sin esa presión y exigencia. Conseguir las cosas poco a poco, se valoran mucho más. Cuando te viene todo hecho te puedes creer que lo has conseguido todo".
Raphinha, en un partido del Leeds / Europa Press
Adama lo tiene complicado
Adama Traoré inició su segunda etapa en el Barça de una forma espectacular, siendo uno de los mejores en los partidos contra el Atlético de Madrid y el Espanyol, en los que dio una asistencia en cada uno. Con el tiempo, sin embargo, su rendimiento se ha ido apagando, coincidiendo además con el retorno por todo lo alto de Dembélé. Xavi prefiere que el francés se quede a que lo haga Adama, por lo que todo va a quedar a expensas de lo que suceda con Dembélé.
Y es que el Barça sigue trabajando para lograr fichar un extremo. El que más gusta es Raphinha, del Leeds, aunque tampoco se descarta ni a Antony, que está cerca del Liverpool, ni a Dani Olmo, que está demostrando con la selección española ser un jugador muy a tener en cuenta. Además, Olmo ya estuvo cerca del Barça en invierno y tiene el visto bueno de Xavi.
Imagen principal: Jorge Mendes quiere que Adama se quede en el Barça y Trincao en el Wolves / Europa Press