El anuncio de la salida de Xavi Hernández a final de temporada provoca un terremoto en el Barça. Sin él, Joan Laporta se ve obligado a tomar una serie de decisiones, en lo que concierne sobre todo al relevo del técnico catalán. Pero tampoco olvida los cambios que se tienen que hacer en la plantilla, que no son pocos.

Sin Xavi al frente, la planificación de la plantilla para la próxima temporada queda, de momento, únicamente en manos del presidente blaugrana y de Deco. Esto abre la puerta a hacer los cambios que consideren necesarios, sin la presión de un entrenador que en ocasiones sobreprotegía a algunos de sus jugadores. El caso más flagrante es el de Sergi Roberto.

Sergi Roberto Osasuna Barça / Foto: EFE
Sergi Roberto lamentando una ocasión fallada contra Osasuna / Foto: EFE

Sergi Roberto, el primero en salir

El mediocentro catalán ha vivido en la cuerda floja durante los últimos años. Su figura ha estado eternamente cuestionada, por ser uno de los últimos integrantes que quedaban de un Barça que fue glorioso en su día, pero que no había sabido renovarse. Este curso, después de las salidas de jugadores tan importantes como Jordi Alba, Sergio Busquets o Gerard Piqué, el catalán pasaba a ser el principal representante de esta generación. Ahora, además, con el brazalete de capitán.

Desde la llegada de Laporta a la presidencia del Barça, Sergi Roberto nunca ha sido renovado por más de un año. Una muestra de la limitada confianza que la directiva tenía en él. Solo la insistencia de Xavi en mantenerlo ha permitido que el polivalente jugador haya seguido vistiendo de blaugrana. Sin la protección del técnico catalán, el futuro del capitán está visto para sentencia.

Sergi Roberto / Foto: Europa Press
Sergi Roberto celebrando un gol contra el Almería / Foto: Europa Press

Capaz de lo mejor... y de lo peor

Esta temporada, que podría ser la última del canterano culé, ha sido muy irregular a nivel individual. Empezó asumiendo claramente el rol de suplente, con algunas apariciones esporádicas entrando desde el banquillo. Aun así, fue decisivo en algunos partidos, como la visita al Granada. Con su gol, el de Reus empató un partido que había empezado con una desventaja de dos goles para su equipo.

Pero su actuación más aclamada por compañeros y aficionados fue contra el Almería, en el último partido del 2023. El capitán lideró a su equipo con un doblete en la segunda parte que sirvió para darle la victoria al Barça en un partido contra el colista que se había complicado más de lo esperado. Sin embargo, sus logros quedan empañados por errores tan importantes como el que cometió contra el Athletic Club de Bilbao. Una pérdida suya en campo propio le acabó costando el gol, y la eliminatoria, a su equipo. Un resumen de lo que ha sido su carrera en el Barça, llena de sorpresas y decepciones, que parece llegar a su fin.