En Inglaterra dan por hecho que Harry Kane moverá ficha el próximo verano. El delantero del Bayern de Múnich ya ha empezado a definir sus preferencias y, para sorpresa del entorno azulgrana, el Barça no aparece entre sus destinos deseados. El jugador valora el nivel competitivo inmediato, la estabilidad del proyecto y la capacidad económica del club que lo quiera fichar, y en esos parámetros el Barça no supera el corte.
El Manchester City es su primera opción
Y es que el regreso a la Premier League es su gran deseo. De este modo, el Manchester City se ha convertido en el candidato principal para hacerse con sus servicios. Kane ve con muy buenos ojos trabajar junto a Pep Guardiola, convencido de que el técnico catalán puede potenciar aún más su rendimiento. La realidad es que el delantero siente que competir otra vez en la liga donde construyó su carrera es un paso natural y muy atractivo para él.
El City, además, fantasea con la idea de juntarlo con Erling Haaland. En el Etihad no descartan una dupla que muchos considerarían imposible, convencidos de que Guardiola sabría encajar a dos de los mejores ‘9’ del planeta. Para Kane, formar parte de un proyecto tan dominante y con aspiraciones claras a ganar la Champions es un incentivo enorme que pesa en su decisión final.
El Bayern también convence a Kane
Y es que, pese a todo, Kane no descarta continuar en el Bayern. El delantero se siente cómodo, valorado y plenamente integrado en el club. Disfruta de la Bundesliga, del contexto competitivo y de la estabilidad personal que le ofrece Múnich. La realidad es que no existen tensiones ni urgencias para salir. En el Bayern lo consideran esencial y están dispuestos a hablar de una renovación en términos muy favorables.
En su entorno recuerdan que Kane está viviendo una etapa tranquila, sin presiones extremas y con un proyecto sólido a su alrededor. Esa comodidad pesa, y mucho, en un jugador que busca estabilidad en los últimos grandes años de su carrera. Alejarse de ese entorno no es una decisión que vaya a tomar a la ligera.
Así pues, el gran perjudicado de esta lista de preferencias es el Barça. El delantero no ve al club azulgrana preparado para ganar la Champions, especialmente en esta etapa de reconstrucción, ni encuentra garantías económicas suficientes para afrontar un proyecto de primer nivel. La situación financiera del club y los constantes ajustes salariales no seducen a un Kane que exige máxima estabilidad.
