El FC Barcelona tiene sobre la mesa un asunto que no puede alargarse mucho más. Eric Garcia, que finaliza contrato el próximo verano, se ha convertido en un jugador indispensable para Hansi Flick en este arranque de temporada. El técnico alemán lo ha dejado claro a la dirección deportiva y, especialmente, al presidente Joan Laporta: la renovación del defensor debe cerrarse cuanto antes.
De descartado a imprescindible
El caso de Eric Garcia es uno de esos giros que sorprenden incluso dentro del propio vestuario. El canterano parecía condenado a salir del club hace apenas un año, cuando su protagonismo era escaso y los rumores de cesión o traspaso se multiplicaban. Sin embargo, con la llegada de Flick todo cambió.
El entrenador alemán ha encontrado en Eric un futbolista polivalente, capaz de rendir como central y, sobre todo, como lateral derecho, una posición que el Barça llevaba tiempo sin tener bien cubierta. Su capacidad táctica, disciplina y lectura de juego han convencido a Flick hasta el punto de considerarlo titular en cualquiera de las dos posiciones.
Flick, claro en su petición
La insistencia de Flick ha sido evidente en las reuniones con la dirección deportiva: Eric debe seguir, es clave para el proyecto. El técnico valora su profesionalidad y el hecho de que, a su edad, todavía tenga un enorme margen de crecimiento. Además, Eric conoce perfectamente el club y no necesita adaptación, algo vital en una plantilla que busca estabilidad tras varios cambios.
Laporta y Deco saben que la renovación no será sencilla, porque el jugador es consciente de que, al acabar contrato, podría salir libre el próximo verano y ya ha despertado el interés de varios equipos europeos. Sin embargo, el Barça confía en que el sentimiento de pertenencia y la confianza de Flick jueguen a favor de una renovación rápida.
Una pieza clave para el futuro
El club azulgrana ve en Eric una pieza de futuro. No solo por su polivalencia, sino también porque se ha ganado el respeto del vestuario. Compañeros y cuerpo técnico destacan su carácter discreto fuera del campo y su capacidad para rendir en partidos de máxima exigencia sin perder la calma.
Su caso recuerda al de otros jugadores formados en La Masia que, pese a las dudas iniciales, acabaron consolidándose gracias al trabajo diario y la confianza de un entrenador que supo darles continuidad. Flick está convencido de que Eric puede seguir esa línea y convertirse en uno de los referentes defensivos de la próxima década en el Barça.
Laporta tiene la última palabra
La pelota está ahora en el tejado de Laporta y su junta directiva. La petición de Flick es clara y el tiempo apremia: si no se llega a un acuerdo antes de enero, Eric será libre de negociar con cualquier club. El Barça no quiere llegar a esa situación y Flick lo ha dejado claro: renovar a Eric Garcia debe ser una prioridad inmediata.