El deporte femenino español hace tiempo que está de enhorabuena. La diferencia de recursos y de atención mediática es evidente cuando se compara con el masculino, pero poco a poco, las distancias se van reduciendo. Un ejemplo de este cambio de paradigma es el fútbol, cada día más profesionalizado y con una eco más grande gracias, en parte, a la decidida implicación de las marcas y algunos medios de comunicación.

El Barça y el Atlético de Madrid aprovecharon el empuje que supuso el Mundial de Canadá 2015, un torneo que enganchó casi 27 millones de personas delante del televisor para seguir la final entre Estados Unidos y Japón. La profesionalización del fútbol femenino llega en la misma época en la que las atletas españolas tocan el techo en Mundiales o Juegos Olímpicos.

Los datos de los dos últimos Juegos son especialmente clarificadores. Las mujeres, a pesar de tener menos fichas federativas que los hombres, son las que han aportado más medallas a la delegación española. En los Juegos Olímpicos de Londres 2012 compitieron 112 mujeres y 166 hombres. El medallero final hizo buena el dicho: 'Es mejor calidad que cantidad'. Las catalanas Mireia Belmonte y Ona Carbonell fueron las dos abanderadas del deporte femenino. Y es que consiguieron cuatro de las once medallas que se colgaron las mujeres. Los hombres, en cambio, sólo sumaron siete.

  Deportista Disciplina
  Marina Alabau Vela
  Tamara Echegoyen
Ángela Pumariega
Sofía Toro
Vela
  Mireia Belmonte Natación
  Mireia Belmonte Natación
  Ona Carbonell
Andrea Fuentes
Natación sincronizada
  Brigitte Yagüe Taekwondo
  Equipo Waterpolo
  Equipo Balonmano
  Equipo Natación sincronizada
  Maialen Chourraut Piragüismo
  Maider Unda Lucha


En los Juegos Olímpicos de Rio 2016 la historia fue la misma. Cuatro años después, la presencia femenina sufrió un aumento significativo: 163 hombres y 143 mujeres. El Comité Olímpico Español empezaba a explotar la fórmula del éxito. Después de 17 días de competición en Brasil, el medallero final de la delegación española no dejó ningún tipo de duda. El deporte femenino volvió a reinar con nueve de las diecisiete medallas. Y Belmonte personificó el cambio de tendencia.

  Deportista Disciplina
  Mireia Belmonte Natación
  Maialen Chourraut Piragüismo
  Carolina Marín Badminton
  Ruth Beitia Atletismo
  Nuria Marqués Vela
  Eva Calvo Taekwondo
  Equip Baloncesto
  Equip Gimnástica rítmica
  Mireia Belmonte Natación
  Lydia Valentín Halterofilia


El deporte femenino, a pesar de las dificultades aparentes para triunfar en disciplinas minoritarias, brilla con más fuerza y reclama unas condiciones que se ha ganado a pulso. La Asociación para Mujeres en el Deporte Profesional ha querido aprovechar este 8 de marzo y la primera vaga feminista en la historia de España para reivindicar las discriminaciones por motivo de género con un manifiesto. Además, ha destapado una lista de obstáculos difíciles de sortear: "Deportistas invisibles en los medios de comunicación, sin contratos laborales, sin convenios, sin Ligas profesionales, obligadas a firmar cláusulas denigrantes como las relacionadas con el embarazo y la cesión de sus derechos de imagen". Todo eso, por el simple hecho de haber nacido mujer.

Todavía queda mucho camino por recorrer, pero es evidente que el deporte femenino tiene argumentos suficientes para acabar revirtiendo la situación. El nivel de las deportistas es cada vez es más alto y los éxitos son un reclamo demasiado potente como para mirar, intencionadamente, hacia otro lado.