Raphaël Varane ha pasado de ser uno de los defensas más cotizados del planeta, a estar en una situación límite. Es cierto que es titular en el Manchester United, al menos por el momento, pero pese a ello no está nada contento ni satisfecho. Porque tampoco hay que olvidar que comenzó la temporada siendo suplente, y que únicamente los constantes errores de Harry Maguire provocaron que Erik Ten Hag, el entrenador, confiara en él.
Pero la realidad es que el internacional francés no ha estado mucho más acertado. Ha seguido cometiendo errores, y fue uno de los señalados en la goleada contra el Manchester City, viéndose superado en todo momento por Erling Braut Haaland. De hecho, acabó siendo sustituido antes del descanso, argumentando unas molestias físicas. Otro problema que le ha acompañado durante los últimos años, pues ha sufrido muchas lesiones, especialmente musculares.
En Old Trafford estaban convencidos de que con su fichaje lograrían solucionar los problemas en la retaguardia que arrastraban, y por ello desembolsaron 50 millones de euros. Sin embargo, en ningún momento ha justificado esa inversión, y no ha sido el líder que vaticinaban. Por esa razón tienen completamente decidido acudir al mercado invernal e incorporar a un central de primer nivel, que devuelva al ex del Lens al banquillo.
Únicamente Lisandro Martínez está respondiendo a las expectativas que generó con buenas actuaciones, y Varane ya es considerado como un fichaje fallido. El campeón del Mundial de Rusia es el primero que no está satisfecho consigo mismo, y que se arrepiente de abandonar el Real Madrid para unirse a un proyecto en decadencia, como es el de los ‘red devils’. Lamentablemente, ya es demasiado tarde para echar marcha atrás en el tiempo.
Y sabe que un regreso al Santiago Bernabéu es completamente inviable, pues en la posición de central hay mucha competencia, con cracks como Eder Militao, Nacho Fernández, Jesús Vallejo, Antonio Rüdiger y David Alaba.
Florentino Pérez no quiere saber nada de Varane
Aunque Varane fue una pieza indispensable para Carlo Ancelotti en su primera etapa en el Madrid, y por supuesto para Zinedine Zidane, Florentino Pérez no quiere saber nada de él. Ya se lo advirtió cuando decidió no renovar su contrato e iniciar una aventura en la Premier League.
Consideró que se marchaba por dinero, y que era una traición imperdonable, y por lo tanto tendría las puertas cerradas en caso de querer regresar en un futuro, justamente lo que ha sucedido.