La temporada 2019/2020 era ilusionante para el Espanyol: volvían a jugar en Europa después de 12 años y con una gran campaña sobre el terreno de juego. Todo era alegría en verano del año pasado, pero ahora el tema ha cambiado 180 grados. Los blanquiazules están en una de las situaciones más críticas de los últimos años y necesitan un auténtico milagro para salvar la categoría.

Abelardo, tercer entrenador destituido

Ahora mismo, el Espanyol es el colista de la Liga y tiene la salvación a ocho puntos cuando quedan siete jornadas. Y lo tendrán que hacer sin Abelardo Fernández, que ha sido destituido este sábado.

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EFE

Pero la desastrosa temporada del Espanyol es como consecuencia de la pésima gestión deportiva del club. Dos de las estrellas de la temporada pasada, como son Borja Iglesias y Mario Hermoso, se marcharon y la entidad no se reforzó lo suficiente para asumir estas bajas.

El club catalán ha hecho remodelaciones en su organigrama durante esta temporada viendo los resultados del equipo y cada vez Rufete tenía más poder.

Rufete tiene el control del área deportiva

Ahora mismo, el valenciano asume el cargo de entrenador después de haber conseguido el control absoluto del área deportiva del Espanyol. Rufete llegó en 2018 como el director de fútbol profesional y bajo la dirección de Óscar Perarnau. Perarnau fue perdiendo fuerza con los años y pasó de director general deportivo a secretario técnico. El pasado mes de mayo, fue despedido.

Oscar Perarnau RCD Espanyol

RCD Espanyol

El Espanyol también anunció la salida de Fran Navarro, responsable del fútbol base. El conjunto blanquiazul decidió dar la responsabilidad de toda el área deportiva a Rufete. El valenciano asume por primera vez el banquillo de un equipo de Primera División y como experiencia sólo cuenta cuando fue el técnico del Ibiza.

El tiempo ha demostrado que el Espanyol ha sido incapaz de reaccionar esta temporada a pesar de asumir el mayor gasto de la historia del club: 59,5 millones de euros.

Después de la marcha de Rubi, la entidad blanquiazul ha visto pasar a tres entrenadores y ninguno de ellos ha sido capaz de revertir la situación. David Gallego, Pablo Machín y Abelardo han consumado un fracaso de temporada y casi todas las quinielas apuestan por un Espanyol que vuelve a Segunda División 26 años después.