Días muy movidos en can Barça a pesar de estar confinados por el coronavirus. En los últimos días han habido reuniones importantes para plantear soluciones de cara a mejorar la deteriorada salud económica del club, y Josep Maria Bartomeu tiene que empezar a tomar decisiones. El ERTE está más presente que nunca.
El domingo pasado ya hubo una reunión del presidente blaugrana con los cuatro capitanes del primer equipo de fútbol y se rechazó la primera propuesta planteada de recorte de sueldos durante el tiempo que dure la crisis del Covid-19. Una primera negativa que complica la decisión de un Barça ahogado por la masa salarial deportiva, que suponen unos 600 millones de euros, y gran parte se lo llevan los futbolistas del primer equipo masculino de fútbol.
FC Barcelona
En el mismo sentido también ha habido varias reuniones con los responsables de cada área con los capitanes de las diversas secciones profesionales del club.
La entidad deportiva que más dinero ingresa del mundo, o al menos eso dice el club, se encuentra con el agua en el cuello por la pérdida de muchos millones por el parón de las competiciones, sobre todo de fútbol masculino.
FC Barcelona
Temblando por el ERTE
Este jueves habrá reunión telemática de la junta directiva y el Barça planteará la opción del ERTE con la intención de aplicarlo a sus trabajadores, pero con una diferenciación con los jugadores y técnicos de los deportes profesionales del club (fútbol masculino, fútbol sala, baloncesto, balonmano y hockey), y con el equipo femenino de fútbol incluido.
En el caso de los deportistas —los que más cobran en el club— la intención es hacer una reducción de la jornada que también comportaría una importante rebaja de los sueldos. Esta disminución de la ficha podría rondar el 70% y la única garantía es que cobrarían la totalidad de su sueldo si finalmente se acaba la competición con normalidad (complicado que se aplique lo mismo con el primer equipo masculino de fútbol).
EFE
La medida se implementaría de manera retroactiva a partir del 13 de marzo, el día que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, decretó el estado de alarma.
De momento, ya hay malestar de los deportistas, y la situación muy probablemente acabará llevando al Barça a nuevos conflictos judiciales con sus jugadores. E, incluso, podría acabar con algún deportista rompiendo el contrato con el club y marchándose libre a otro equipo. Tiempo al tiempo.