El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sigue siendo noticia por cualquier mínimo paso que dé. Y ahora vuelve a destacar por sus amenazas relacionadas con el Mundial de Fútbol que se disputará el verano del año que viene en territorio de Estados Unidos, México y Canadá. Un Trump beligerante que vuelve a aplicar su manera de hacer más agresiva para llevarlo todo a su terreno.

Las amenazas de Donald Trump a las sedes demócratas

Ahora ha sido el turno de atacar las ciudades que serán sede de los partidos de la competición de selecciones más importante del mundo. Y como no todos los alcaldes de las ciudades en cuestión son republicanos como Trump, el actual presidente de EE.UU. ha vuelto a la carga. Trump ha amenazado con cambiar de sede algunos partidos del Mundial 2026 si considera que la ciudad que acoge estos enfrentamientos no es segura, y ha añadido que esto también podría pasar en el caso de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles de 2028.

Donald Trump final Mundial de Clubs / EFE
Donald Trump, durante la celebración del Chelsea en el Mundial de Clubes / Foto: EFE

"Si alguien está haciendo un mal trabajo, y percibo que las condiciones son inseguras, llamaría a Gianni (Infantino), el presidente de la FIFA (…) y le diría: 'Movámoslo a otro lugar'", ha asegurado Trump. "Podría decir lo mismo de los Juegos Olímpicos, porque, como saben, tenemos eventos en diferentes lugares. Los Juegos Olímpicos se celebran en Los Ángeles. Si pensara que Los Ángeles no va a estar bien preparado, lo trasladaría a otra ubicación", ha añadido el mandatario republicano.

El caso es que Trump no tiene poder para modificar una sede o el lugar de un partido del Mundial, pero mantiene una relación muy cercana con Infantino, que sí lo tiene.

Donald Trump Gianni Infantino / Foto: dpa - Sven Hoppe
Donald Trump y Gianni Infantino, durante el Mundial de Clubes / Foto: dpa - Sven Hoppe

Boston, el foco de las amenazas de Donald Trump

Unas palabras que iban directamente dirigidas a la ciudad de Boston, cuya alcaldesa es la demócrata Michelle Yu, y que se encuentra en los últimos meses en el punto de mira de la Administración por considerar que interfiere en las políticas contra la migración. Y es por eso que está en duda la presencia en el Mundial del Gillette Stadium de Foxborough, un municipio que colinda con Boston, al igual que los siete partidos del Mundial que está previsto que se disputen.

Estas amenazas se suman a las que lanzó en septiembre contra otras ciudades gobernadas por demócratas, como Seattle o San Francisco, a las que advirtió que les podría retirar partidos del Mundial 2026 si las considera inseguras. Así pues, algunas de las once sedes que Estados Unidos tiene para el Mundial 2026 están bajo amenaza, igual que otras ciudades gobernadas por demócratas, como Los Ángeles, Nueva York, Atlanta, Houston, Boston o Filadelfia.

Lo que también queda claro es que Donald Trump quiere interferir en los comicios que algunas de las ciudades y sus estados tienen de aquí a unas semanas. El actual presidente de Estados Unidos puede considerar que lanzar estos mensajes puede dar votos a los candidatos de su partido, y así mandar sin problemas añadidos durante el Mundial de Fútbol de 2026.