Josep Maria Bartomeu vuelve a caer de pie. Aunque reciba por todos lados y que la inoperancia le juegue en contra, siempre se levanta y continúa con su propósito. El que ahora tiene, esperando que la auditoría por el BarçaGate no le acabe trastocando los planes, es llegar hasta el final de su mandato, que acaba en junio del 2021.
Tras la dimisión en bloque de seis directivos, se quedó con una junta vacía y faltada de al menos un miembro, el número 14, para continuar su mandato con la legitimidad que marcan los estatutos del Barça.
No ha dimitido nadie más y, por este motivo, la junta extraordinaria celebrada este martes ha sido clave para el futuro de Bartomeu. El presidente blaugrana ha nombrado el decimocuarto directivo, que es Jaume Carreter Felip y ejercerá de responsable de los deportes amateurs del club. Socio desde el 2009, Carreter formaba parte de la comisión social del club, como responsable y coordinador de los deportes no profesionales.
El fichaje de Bartomeu va en la línea de la fidelidad —faltada por los directivos dimitidos— para acabar un mandato más que polémico que empezó en el año 2015.
FC Barcelona
Desde las dimisiones de hace unas semanas que la junta directiva había quedado con sólo 13 miembros, cosa que no le permitía seguir con el mandato según el artículo 35 de los estatutos del club. Y por fin ha llegado el primer fichaje de un Bartomeu más que cuestionado.
Según informa Mundo Deportivo, las incorporaciones directivas no han acabado y, en la junta ordinaria que tendrá lugar el próximo mes de mayo, está tiene previsto que Bartomeu nombre una o dos directivas más.
También se ha nombrado a Joan Bladé como directivo responsable de la coordinación de todas las acciones y medidas de la crisis del coronavirus.