Este fin de semana al Gran Premio de Catalunya parece que tampoco será el de Fernando Alonso. Si su McLaren Honda todavía no es el peor coche de parrilla, aunque no ha acabado ninguna carrera, esta vez ha dado un paso más para conseguir el premio. Sólo dos curvas en los primeros entrenamientos libres del viernes para que se le rompiera el motor y tuviera que abandonar.

Perdiendo líquido, perdiendo oportunidades y perdiendo carreras. No hay manera de avanzar. Ni el mismo Alonso se puede creer el qué se está viendo. Todo parece esperar que será un nuevo Gran Premio en blanco para el asturiano. Y quién sabe si el milagro para él ahora es acabar la primera carrera de este Mundial en el Circuito de Barcelona-Catalunya.

A la segunda sesión ha mejorado respecto de las bajas expectativas. Un total de 21 vueltas completadas con el nuevo motor, pero último clasificado de la sesión a más de tres segundos del primero. Resultados desastrosos en un fin de semana que empieza de la peor manera posible.

Hamilton manda en Montmeló

En el Circuito de Barcelona-Catalunya sólo hay un nombre propio, pero dos escuderías. Lewis Hamilton se ha impuesto en las dos sesiones en Montmeló por delante a su compañero de equipo Valtteri Bottas. Mucho poca la diferencia entre los dos Mercedes, que han empezado un gran fin de semana.

Por detrás de ellos, los dos Ferrari repitiendo las posiciones en las dos sesiones. Kimi Raikkonen ha sido tercero y Sebastian Vettel ha sido cuarto. Y la misma tónica en la tercera fila con los dos Red Bull (Verstappen y Ricciardo).

Mejorando mucho el rendimiento de su compañero de equipo, Carlos Sainz ha conseguido entrar en las dos sesiones de libres dentro del top 10. Décimo en la primera sesión y repitiendo plaza en la segunda. A menos de un segundo y medio de Hamilton, aunque recogiendo datos de funcionamiento de su monoplaza de cara a la calificación del sábado y la carrera del domingo.

Montmeló vuelve a ser el centro del mundo del automovilismo y llega con muchas novedades como es habitual. Las primeras cartas se han dejado sobre el asfalto, pero todavía no está toda la mano mostrada para que cada equipo tiene sus armas bien guardadas. La calificación dará las primeras pistas.