El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha dado este lunes una muestra más de su falta de empatía contra sus detractores por muy delicada que sea la situación en la que se encuentren. Tras conocerse que Rob Reiner y su mujer han aparecido apuñalados en su mansión de Brentwood (Los Ángeles), el mandatario estadounidense ha lamentado los hechos, pero sin ocultar su animadversión contra el director cinematográfico. De hecho, en un mensaje en Truth Social, Trump, que acusa al realizador de tener una obsesión enfermiza contra él, ha insinuado que Reiner se había buscado el final fatal.
“Anoche ocurrió algo muy triste en Hollywood. Rob Reiner, un director de cine y estrella de comedia que alguna vez tuvo mucho talento, pero que estaba atormentado y en crisis, murió al lado de su esposa, Michele”, escribe Trump en la red social. Acto seguido, el presidente de los Estados Unidos atribuye el crimen a “la ira que provocó en otros por su enorme, terca e incurable aflicción con una enfermedad mentalmente paralizante conocida como el Síndrome de Trastorno por Trump”.
Su mensaje continúa afirmando: “Fue conocido por haber llevado a la gente a la LOCURA debido a su furiosa obsesión con el presidente Donald J. Trump, con una paranoia evidente que llegó a nuevos niveles a medida que la Administración Trump superaba todas las metas y expectativas de grandeza”, ha apuntado.
¿Qué había dicho Reiner contra Trump?
El director cinematográfico había expresado críticas contra Trump en una entrevista para influir en compañías de entretenimiento y medios de comunicación, y comparó las políticas del gobierno de los Estados Unidos con la era del macartismo: “Esto parece casi ingenuo en comparación con lo que está pasando en los Estados Unidos en este momento”, dijo. Rob Reiner y su esposa, la productora y fotógrafa Michele Reiner, han sido localizados sin vida el domingo en su casa de Los Ángeles, donde según los primeros indicios filtrados por la prensa habrían sido degollados por uno de sus hijos, que la policía ha detenido. La revista especializada People apunta que el hijo mediano de la pareja, Nick, como presunto autor de los hechos, mientras que el portal TMZ ha informado que un familiar los habría degollado, “posiblemente” después de una pelea.
Rob Reiner ha sido durante mucho tiempo uno de los directores más prolíficos de Hollywood, y su obra incluye algunas de las películas más memorables de los años ochenta y noventa —con éxitos como las ya mencionadas This is Spinal Tap (1984), La princesa prometida (1987) y Cuando Harry conoció a Sally (1989).