2020. Llega el confinamiento y decenas –o centenares– de artistas catalanes aprovechan la oportunidad para empezar a probar cosas nuevas, a experimentar con su música, a conectar con sus seguidores a través de las redes sociales. Mientras todo eso pasa, sin embargo, uno de los grupos más icónicos del país, los Manel, no se dejan ver. No estaban ganduleando, sólo creaban.

Este jueves, la banda de Guillem Gisbert, Martí Maymó, Roger Padilla y Arnau Vallvé ha presentado Tipus Suite, el segundo sencillo que estrenan desde la salida de su último disco, Per la bona gent, el 2019. El primero, L'amant malalta, lo lanzaron el pasado 11 de marzo contra todo pronóstico, hecho que causó un gran impacto en las redes sociales.

En Twitter, el grupo ha explicadp que Tipus Suite forma parte de un EP de tres canciones que han llamado L'amant malalta –el mismo nombre que el primer single– y que se publicará el 16 de abril, en formato físico pero solo en vinilo.

"El meu amor s’està dutxant, l’habitació és tipus suite, jo vaig sentint l’aigua com cau, la sento caure des del llit...", dice la letra.

Actualmente Manel sigue presentando su último disco, Per la bona gent, cuya gira quedó interrumpida por el confinamiento. El grupo reanudó la actividad con algunos conciertos a mediados del 2020, y este año ya ha actuado en Barcelona, Monòver, Terrassa, Sant Cugat, Madrid y Valencia, entre otras ciudades.

'L'amant malalta', meh

Aunque el estreno de L'amant malalta generó uno alud de reacciones positivas, lo cierto es que el single no es la mejor creación de los Manel, precisamente. Al menos eso es el que asegura Pep Antoni Roig en el artículo que publicó cuatro días después del lanzamiento. "Desde aquel momento un rumor persistente que da vergüenza confesar, casi como quién sufre morenas en silencio, atormenta dolorosamente a los fans del grupo barcelonés: ¿y si realmente la nueva canción de Manel es un artefacto terriblemente cojo? Esta es la dolorosa pregunta que Catalunya entera hace cuatro días que se repite delante del espejo, nos guste o no confesarlo".

Guillem Gibsert, en un concierto cuando la vida era normal / ACN