El escritor Patrice Nganang ha sido detenido por las autoridades camerunesas tras publicar un artículo sobre la revuelta que se vive en la región secesionista del Oeste del país. Nganang había desaparecido el pasado martes día 5 en Yaoundé cuando iba a tomar un vuelo hacia Zimbabue. Las autoridades ocultaron su paradero durante algunos días, pero finalmente han reconocido que lo habían detenido y le han acusado de "inmigración ilegal" y "ofensas y amenazas al presidente". Parece ser que la acción policial ha sido desencadenada por un artículo publicado en una revista, sobre la revuelta independentista de la zona anglófona del Camerún, y por un mensaje en Facebook muy duro con el presidente camerunés Paul Biya. Varios escritores africanos han iniciado una acción en Change.org para reclamar la liberación inmediata del autor.

El artículo de Nganang

El artículo que ha causado la detención de Nganang, "Cameroun, carnet de route de l'écrivain Patrice Nganang en zone (dite) anglophone", publicado en Jeune Afrique, una de las revistas más populares del continente, no era una apología de los independentistas, pero reconocía que los soberanistas anglófonos habían consolidado, en los últimos tiempos, "la campaña no violenta más larga y más exitosa de la historia del país". Nganang reconocía que los anglófonos sufren una dominación lingüística en el país. Además, el escritor deploraba la ocupación militar de la región anglófona y apuntaba que buena parte del secesionismo estaba integrado por individuos pacíficos. Nganang criticaba que las autoridades camerunesas se negaban a dialogar (una evidencia) y que eso había acabado provocando el exilio de la élite anglófona. Lo que sin duda ha irritado más a Biya y los suyos es que en las conclusiones del artículo, Nganang apostaba por un cambio político como única solución para el problema: "Sin duda, hará falta otro régimen político para que el Estado entienda que la ametralladora no puede contener a una multitud en marcha. Sólo un cambio en la cúpula del Estado podrá arreglar el conflicto anglófono en Camerún".

Un escritor muy especial

Patrice Nganang (Yaoundé, 1970) es uno de los cameruneses con más proyección internacional, y por eso da miedo al régimen dictatorial de Paul Biya (en el poder desde 1980). El escritor actualmente enseña literatura en Estados Unidos y tiene nacionalidad camerunesa y norteamericana. Es uno de los escritores más populares del África francófona. Con su novela Temps de chien (1999), sobre la vida en el mercado de Mokolo de la capital camerunesa, vista con ojos de perro, obtuvo dos premios de gran renombre: el Margarite Yourcenar y el Gran Premio Literario del África Negra. También ha publicado varios ensayos sobre la realidad camerunesa y africana. Es conocido por ser muy crítico y por el tono ácido y humorístico de sus obras, que le han hecho muy popular. No hay ninguna obra de Nganang traducida al catalán. En castellano el Aleph publicó en el 2010 una de sus obras clave: Tiempo de perro.

El soberanisme anglófono

El Kamerun alemán fue dividido entre ingleses y franceses al fin de la Primera Guerra Mundial. La Sociedad de Naciones partió el país y lo sometió al mandato de Francia (la parte más importante) y Gran Bretaña (la zona Oeste). En 1961, tras la independencia del Camerún francés, se organizó un referéndum en las regiones del Camerún anglófono para decidir si se unían a Camerún o a Nigeria. La zona norte se unió a Nigeria y la zona sur se integró en la República Federal del Camerún. Pero en 1972 el gobierno camerunés anuló la República Federal y estableció la República Unida, haciendo desaparecer las instituciones de autogobierno de la zona anglófona. A partir de aquel momento esta región ha sufrido una marginación histórica y las protestas han menudeado. En los años 1990 el Oeste fue el principal feudo del Social Democratic Front, de John Fru Ndi, el gran opositor a Paul Biya.

Ambazònia: independencia el 1-O

Ante el fracaso del SDF en el intento de reformar todo el Camerún, en los últimos años los anglófonos se han ido pasando al soberanismo. El movimiento independentista ha organizado grandes protestas pacíficas en los últimos meses (entre las cuales una huelga escolar muy exitosa). Pero el gobierno camerunés ha sido impermeable a las protestas. El 1-O, mientras los catalanes votaban en su referéndum, se proclamó la independencia de la región, con el nombre de Ambazonia. Las celebraciones populares fueron brutalmente reprimidas, y hubo unos 15 muertos. A partir de este momento empezó a actuar una pequeña guerrilla secesionista. Sus ataques han provocado la muerte de unos pocos policías y ha generado una brutal represión de las fuerzas camerunesas. En las últimas semanas, las autoridades camerunesas incluso han ordenado la evacuación de algunos pueblos, para considerar a sus habitantes sospechosos de colaborar con los "terroristas". Esta medida ha escandalizado a los defensores de los derechos humanos, pero el gobierno camerunés se niega a rectificar.