Dicen que será un fin de semana horroroso, por no decir directamente de mierda. Entramos en mayo, pero dicen, dicen, dicen (los hombres y las mujeres del tiempo) que lloverá a cántaros y hará un frío invernal. No caeremos en aquello tan lamentable de... "hace un día de sofá, manta y Netflix". O sí, porque ya podéis ver, tragaros, zamparos toda de una El inocente, una de las grandes apuestas de Netflix para esta temporada. Producción que, además, ha sido dirigida por el cineasta catalán Oriol Paulo y un reparto de lujo liderado por (dejadnos ser malos pero realistas) el inexpresivo Mario Casas al que acompañan Alexandra Jiménez, Aura Garrido y José Coronado.

Una serie de segundas oportunidades

"Es una serie que habla de las segundas oportunidades, todos los personajes de la serie cargan con una mochila que poco a poco vamos viendo y que al fin todos van a tener que confrontar", explica el director Oriol Paulo (Contratiempo, Durante la tormenta). La serie, de ocho capítulos, es una adaptación del best-seller homónimo del escritor norteamericano Harlan Coben en que se nos explica la historia de Mateo (Mario Casas), Mat, que se ve involucrado en una pelea en la cual muere un joven accidentalmente.

"A mí lo que me atrajo leyendo el libro es cómo un personaje que ha sufrido tanto, que es el de Mario (Casas), de golpe, cuando está a punto de empezar una nueva vida después de todo lo que le ha tocado vivir por culpa de un accidente del destino, le explota una bomba y no sabe por dónde le caen los palos. Me sentí muy angustiado poniéndome en la piel de Mat y eso fue lo que me atrapó de la novela", explica el cineasta barcelonés.

Un director muy familiar

La historia arranca nueve años después de este trágico punto de inflexión cuando Mat ya tiene una nueva y aparentemente tranquila vida con Olivia (Aura Garrido), su esposa. Una inexplicable llamada desde el móvil de Olivia mientras ella está de viaje lo descoloca empujándole a una frenética carrera para descubrir la verdad.

Esta es la segunda vez que Paulo trabaja con Casas (Contratiempo) como con Garrido (El cuerpo). "Con Oriol hay una cosa muy bonita, que sigue llamando a los actores con los cuales ha trabajado. Crea una pequeña familia y se siente cómodo. Somos actores poco problemáticos, no damos dolores de cabeza. Somos supermajos", bromea Casas, recientemente ganador del Gaudí y del Goya al Mejor Actor. Garrido es de la misma opinión: "Verlo trabajar es increíble. Y esta serie es el ejemplo perfecto. Es una serie supercompleja, con muchísimos personajes, muchísimas tramas, muchas cosas que van pasando, y tiene un tono muy delicado que hay que mantener siempre para no revelar de más, para que los giros ocurran como y cuando tienen que pasar"