El dibujante francés Jean-Jacques Sempé, autor e ilustrador de la serie de dibujos "El pequeño Nicolás" y también conocido por numerosas viñetas publicadas en la prensa, ha fallecido este jueves a los 89 años de edad. Su familia ha confirmado la noticia y ha explicado que en los últimos días ha estado rodeado de sus seres queridos. Sempé fue creador de las historietas de Nicolás en los años 1950 junto al guionista René Goscinny. Nació en Burdeos en el año 1932 e inició su prolífica trayectoria con la publicación de acuarelas en la prensa regional francesa. Su prestigio adquirió tal dimensión que empezó a realizar trabajos para la revista The New Yorker. Algunas de las portadas de este medio fueron diseñadas e ideadas por el dibujante francés.

De hecho, Sempé trabajó durante cuatro décadas para The New Yorker, pero solo visitó la ciudad de Nueva York en seis ocasiones. Sin embargo, sus ilustraciones de la Gran Manzana y de París son iconos de estas capitales mundiales. Sus obras se caracterizaban por su sencillez, por su minimalismo, pero al mismo tiempo con un contenido cargado de emoción y reflexión. Muchas de las portadas que hizo para la célebre revista han sido posteriormente transformadas en cuadros y carteles de arte y decoración. En ocasiones, ilustraba unos personajes completamente absorbidos por la soledad de las urbes, así como el hecho de que las ciudades están en constante movimiento y el ruido nunca se detiene.

En una entrevista que concedió a The New Yorker en el año 2018, Jean-Jacques Sempé explicó que viajó menos de lo que se puede esperar a Nueva York por la "barrera de la lengua": "Es un serio problema para mí. Si hubiera hablado inglés bien me hubiera asentado allí probablemente, pero no lo hablo en absoluto; de modo que no quería ser visto como un francés arrogante que solo habla su lengua". Además, también colaboró en la cabecera francesa Paris Match, donde publicaba ilustraciones con un toque más humorístico. De hecho, su último trabajo para ellos se publicó la semana pasada, en el que se ve a un pintor retratando a una mujer sobre la hierba y le comenta: "Piensa en no olvidarme".

Quería ser músico

Inicialmente, su sueño era ser músico, pero esa fue una meta que para él fue inalcanzable: "Es más fácil encontrar un papel y un lápiz que un piano". Sus inicios en la prensa fueron con tan sólo 14 años, ya que dejó la escuela y empezó a trabajar nada más terminar la Segunda Guerra Mundial. Fue en los años 50 cuando nació "El pequeño Nicolás", que originalmente empezó a publicar en el dominical del diario regional Sud Ouest. Esos dibujos adquirieron mucha notoriedad y lo hicieron llegar a la cima gracias al hecho de que la mujer de un editor parisino lo leyó en unas vacaciones en Arcachon y se lo mostró a su marido, que trabajaba en la editorial Denoël. Con ello, "El pequeño Nicolás" llegó a ser un éxito global que alcanzó los cinco millones de ejemplares vendidos antes de 1964, cuando se publicó el último volumen titulado "Joaquín tiene problemas".