El Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), uno de los más prestigiosos del mundo, ha adquirido un gran lote de obras del artista plástico Antoni Llena. Las obras representan varias etapas de su carrera, desde los años sesenta, cuando se iniciaba en el arte conceptual, hasta los trabajos más recientes. La noticia ha sido facilitada por la galería A/34, que ha presentado dos exposiciones del artista catalán en los últimos años. El MOMA ha comprado cinco "esculturas disecadas" de 1968, uno de sus "papeles recortados" de 1986 y un conjunto de 109 dibujos procedentes de la serie "SOS. Senyals de fum des d'un subsòl", un proyecto en el que Llena está metido desde hace algunos años y que en el 2012 expuso en el Tecla Sala de l'Hospitalet y en varios museos catalanes.

Artista gracias a la Caputxinada

Antoni Llena i Font (Barcelona, 1942) ingresó joven en los capuchinos y mientras estaba en el convento se dedicó esporádicamente a la pintura. A partir de 1964 se acercó al arte conceptual. En 1966, durante la Caputxinada, tuvo ocasión de convivir con Antoni Tàpies y Albert Ràfols-Casamada, quienes, junto con Alexandre Cirici i Pellicer, apoyaron su carrera. En 1969 ya hizo su primera exposición individual y empezó a relacionarse con los jóvenes que estaban renovando el panorama artístico catalán. Con Jordi Galí, Sílvia Gubern, Àngel Jové y Albert Porta realizó la primera obra de vídeo-arte del estado español. Llena siempre ha sido partidario del uso de materiales muy sencillos. Tras pasar una década sin crear, en los años ochenta reanudó su conexión con el mundo artístico. Ha sido muy reconocido por sus pequeñas obras de papel, pero también ha realizado grandes obras públicas, como el David i Goliat de la plaza dels Voluntaris o el monumento a los Castellers de la plaza Sant Miquel (un monumento que fue muy polémico y que sufrió retrasos y modificaciones).

Monumento a los castellers (plaza san Miquel Barcelona)

Monumento a los Castellers. Foto: Jordi Ferrer.

Un hombre sencillo que apuesta por la fragilidad

Antoni Llena siempre ha apostado por el equilibrio y la fragilidad. En una ocasión declaró: "A través de mis pinturas y esculturas (que son, de hecho, una misma cosa), tomo partido por la inconsistencia porque estoy seguro de que defender la fragilidad equivale a defender la realidad. La pintura es pensamiento y no quiero renunciar a inventar ni a invertirla". Llena, que ha sido profesor de la Escola Eina y de la Universitat de Girona, siempre ha sido un hombre discreto, pero el Departamento de Dibujos y Grabados del MOMA ha asegurado que se siente muy satisfecho por haber efectuado esta adquisición, porque la obra de Llena refleja muy bien el mensaje que el museo quiere difundir.

 

Foto de portada: David i Goliat, en la plaza de los Voluntarios de Barcelona.