El Ministerio de Consumo investigará posibles irregularidades en la venta de entradas de los conciertos de Bad Bunny a través de Ticketmaster. La decisión llega después que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunciara este lunes a la plataforma ante la administración pública por el “cobro irregular y abusivo” de los tickets de las actuaciones que el cantante puertorriqueño dará en Barcelona y Madrid en mayo y junio de 2026, completando una residencia de doce shows. De hecho, desde Consumo informan que la investigación se incorpora a un expediente informativo que mantienen abierto a varias empresas que se dedican a la venta online para conciertos y otro tipo de actividades. El cantante de Callaíta, Moscow Mule o Voy a llevarte pa PR hará una residencia en España, con dos conciertos en Barcelona y diez en Madrid: 22 y 23 de mayo en el Estadi Olímpic de Barcelona; los días 30 y 31 de mayo, 2, 3, 6, 7, 10, 11, 14 y 15 de junio en el Estadio Metropolitano de Madrid.
Benito Martínez Ocasio agotó las entradas en cuestión de 24 horas: según datos de Live Nation, se vendieron más de 600.000 entradas para los doce conciertos que formarán parte de la gira mundial Debí Tirar Más Fotos World Tour en territorio español. Como defiende la OCU en su denuncia, desde que comenzara la preventa de las entradas, muchos compradores entraron en las webs y se encontraron con que había hasta tres conceptos no reembolsables: gastos de gestión, donación y cargo vip. En ese sentido, las entradas con un gasto mínimo de 79,50 euros vieron como su precio se incrementaba hasta los 269,30 euros al sumarse las tres tarifas adicionales: 3,30 en concepto de donación, 36,50 euros por gastos de gestión y 150 euros por cargo vip adicional. Y, además, denuncian que la mayoría de estos gastos estaban ocultos hasta el momento del pago final.

Precios dinámicos en función del mercado
La OCU también critica el hecho de que sean precios dinámicos que varían 'en función del mercado', sin que se aclare qué factores influyen exactamente y en qué medida, y por eso pide que se apruebe una norma para que los regule. El sistema de precios dinámicos ajusta el precio de las entradas en función de la demanda en tiempo real. Plataformas como Live Nation o Ticketmaster señalan que este sistema sirve para evitar que el precio se dispare en el mercado de segunda mano y combatir la reventa y el fraude. Sin embargo, a las pocas horas de que los conciertos de Bad Bunny hicieran sold out, ya había reventa de entradas a precios desorbitados en plataformas como Via Gogo, a un precio que, depende de la zona, podía superar los 2.000 euros por boleto.
Los compradores, en este sentido, también denuncian que muchos no estaban informados de este posible cambio de precios en tiempo real y que se encontraron con subidas repentinas de precios mientras estaban en la cola virtual, lo que los llevó a cuestionar la transparencia del proceso. En septiembre pasado, y tras ocurrir lo mismo con las entradas de los conciertos que la banda Oasis anunció, la Comisión Europea inició una investigación sobre Ticketmaster.