El astrofísico nacido en Ullastrell (Vallès Occidental) Guillem Anglada-Escudé ha sido considerado uno de los diez científicos más importantes del mundo de este año por la prestigiosa revista Nature. Anglada-Escudé, profesor de astrofísica en la Universidad Queen Mary de Londres y antiguo estudiante de la UB, ha liderado el equipo que ha descubierto "Próxima b", el planeta más próximo a nuestro sistema solar que podría ser habitable.

"Hasta ahora hemos estado buscando planetas; el siguiente paso es buscar vida", anticipaba Anglada-Escudé a finales de octubre, una vez hecha pública la noticia del descubrimiento. Según el científico, "Próxima b" tiene características similares a la Tierra y ofrece la "posibilidad real" de saber si "estamos solos en el universo".

Su descubrimiento: "Próxima b"

"Próxima b" tiene 1,3 veces la superficie de la Tierra y orbita la estrella Próxima Centauri. Según Anglada, se trata de un planeta "con características similares con respecto a la masa y a la energía que recibe de la estrella" con una cantidad de energía que hace pensar que "la superficie sea templada y quizás haya agua líquida". "La de la estrella Próxima Centauri y la de estos planetas pequeños es una historia que justo empieza. Hay mucha emoción en el ambiente, y eso atrae a los jóvenes investigadores más brillantes y promociona la excelencia", ha asegurado. Los resultados del estudio de este planeta se publicaron en la portada de Nature, en un artículo en el cual Anglada-Escudé compartió autoría con Pedro J. Amado, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA).

"De momento no se ha obtenido mucha más información del planeta en concreto. En primavera empieza la buena época para observar la estrella de nuevo y entonces nos pondremos con Próxima otra vez", ha señalado. Para lo que sí que ha servido de momento, ha continuado, es generar una pila de avances teóricos en la comprensión de los modelos climáticos y evolutivos para este tipo de planetas. Sobre si cree que hay vida en otros planetas, el investigador catalán ha contestado no saberlo, pero ha añadido: "Encontraría raro que este no fuera el caso. Lo maravilloso de estos tiempos es que tendremos los medios para responder a esta pregunta los próximos años". "En este sentido, sospecho que la primera evidencia puede venir de otros planetas del Sistema Solar", ha remarcado.

Los secretos de una investigación de calidad

Después de la mención de Nature, Anglada-Escudé ha asegurado que "estaría bien que nos diéramos cuenta de la investigación de gran calidad que puede realizarse en España si se cuenta con un mínimo de recursos y un poco más de reconocimiento institucional". "Si aparecer en listas así ayuda un poco en este sentido, bienvenidas sean las listas", ha indicado el astrofísico.

"Me gustaría destacar que hay numerosas y significativas contribuciones de equipos españoles, sobre todo del IAA, que se han estado preparando para este tipo de investigación con instrumentación de primera línea como el espectrógrafo CARMENES", ha explicado. En esta línea, Anglada-Escudé ha relatado que él y su equipo siguen trabajando en "varios frentes" en relación con este planeta y estrella, y ha añadido que la investigación en astronomía se mueve un poco más lenta que la actualidad informativa "o sea que habrá que tener paciencia".

De momento, el descubrimiento de "Próxima B" ha valido al científico catalán el reconocimiento de la publicación británica, convirtiéndose así en una de las diez personalidades científicas del año, al lado de físicos, ingenieros que desarrollan la inteligencia artificial, investigadores del coral, químicos y biólogos.

Más personalidades

Más allá de Anglada-Escudé, también se encuentran dentro de la lista la argentina Gabriela González por su descubrimiento de las ondas gravitacionales. Un hallazgo que, según la propia autora, "saldrá en los libros" como la respuesta, cien años después, al último interrogante de la Teoría de la Relatividad de Einstein. Como también, el cocreador de la firma de inteligencia artificial DeepMind, Demis Hassabis, por el programa AlphaGo con el cual consiguió vencer al campeón mundial del juego de mesa "go" (conocido como "el ajedrez oriental") o la brasileña Celina Turchi que se ha ganado también un puesto en el ranking para descubrir la relación entre la microcefalia y el virus del Zika.

El nacimiento del primer bebé del mundo engendrado mediante una técnica de reproducción asistida que utiliza ADN de tres padres diferentes se ha hecho realidad este año y Nature ha incluido en su lista al especialista en fertilidad John Zhang, uno los responsables de este hecho. Por otra parte, el científico Kevin Esvelt ha obtenido el reconocimiento de la revista por su descubrimiento de los posibles efectos negativos de una controvertida técnica, que él mismo ayudó a crear y que utiliza la edición genética CRISPR para fomentar o suprimir la expresión de ciertos genes en poblaciones de una especie para perpetuar un rasgo entre los individuos.

El profesor que hizo sonar la alarma de la destrucción de la Gran Barrera de Arrecifes que se extiende a lo largo de 2.300 kilómetros de la costa nororiental australiana, Terry Hughes, también es uno de los 10 científicos más importantes del mundo. Otro éxito que tampoco ha pasado desapercibido para Nature es el de Guus Velders que ha establecido las bases del acuerdo internacional alcanzado por prácticamente todos los países para dejar de producir y utilizar los hidrofluorocarbonats (HFC), unos potentes gases de efecto invernadero muy utilizados en el sector de la refrigeración. Como tampoco lo ha hecho la lucha de la física Elena Long para sensibilizar sobre las dificultades y discriminaciones a las cuales tienen que enfrentarse los físicos gais, lesbianas, bisexuales, transgénero o de cualquier otra minoría sexual.

En último lugar, la neurocientífica Alexandra Elbakyan cierra la lista para desafiar en las publicaciones científicas convencionales con su página web Sci-Hub, que permite acceder de manera gratuita a más de 60 millones de artículos científicos recientes. Según el redactor de Nature Richard Monastersky, los científicos que aparecen este año en la lista componen "un grupo muy diverso, pero todos ellos han jugado un importante papel en los acontecimientos científicos del año".