Los ingleses saben muy bien lo que hacen cuando paran a tomar el a las cinco. Y es que sus beneficios llevan siglos haciendo de él una de las bebidas más demandadas. Sobre todo con la llegada del frío.

El té no es solo un invento para hacer un ‘break’ a media tarde (que también). Es una bebida que aporta un sinfín de beneficios. De hecho, es altamente recomendable para cualquier persona. Además de ser una de las más populares, no aporta calorías pero sí multitud de nutrientes, siempre y cuando elijamos aquellos que, por ejemplo, no supongan una fuente de teína elevada si es que presentamos alguna intolerancia a éste componente, somos sensibles a sustancias estimulantes o si presentamos alguna alteración del sistema nervioso.

Varios tipos de té, todos con beneficios

Por otro lado, y antes de adentrarnos en sus cualidades, es necesario distinguir entre cuatro tipos de té, que provienen de la hoja de la planta ‘Camelia Sinesis’, donde las diferencias entre el tipo y color del té se deben a distinto procesamiento de las hojas.

Te verde
Te verde
  •  Negro se obtiene a través de la oxidación de las hojas por unas horas.
  •  Verde, simplemente, no se oxida.
  •  Rojo se obtiene de la oxidación parcial de las hojas.
  •  Blanco está hecho de las hojas más jóvenes que tampoco se oxidan.

El Té es una fuente natural de cafeína y del aminoácido L-Teanina. Ambas sustancias son estimulantes pero la L-Teanina tiene la particularidad que estimula la actividad de ondas alpha en el cerebro, induciendo a la relajación, lo que podemos resumir en: ‘El Té te activa, a la vez que relaja tu cerebro’. Algo que, además, está asociado a una mayor concentración a la hora de la práctica de ejercicio.

Además, el té es considerado un diurético natural, perfecto para aquellas personas interesadas en mejorar su composición corporal y mantener su sistema limpio. Por otro lado, es una forma fácil y original de hidratarse, sobre todo para aquellas personas a las que les cuesta mucho beber agua o que no tienen el hábito de hacerlo durante el día. Eso sí, evita siempre las opciones industriales con azúcares añadidos.

¿El mejor momento para tomarlo?

Con el estómago vacío, para que este realice mejor su función, y mejor en agua caliente, donde se disuelve mucho más rápido. Además, en invierno, es una bebida caliente que ayuda a regular la temperatura corporal.

¿Cuántas veces al día se puede tomar té?

No existen evidencias científicas que demuestren que el consumo de té varias veces al día sea contraproducente para la salud, aunque deberíamos tener en cuenta que el té contiene ‘Taninos’ que es una sustancia abundante en algunas plantas que puede crear manchas dentales, pero con una correcta higiene bucal deberíamos poder solventar ese problema. En este sentido, algunos expertos afirman que se pueden tomar unos 4 ó 5 tés al día.