Este mes de julio va a pasar a la historia como uno de los más calurosos de las últimas décadas. Ya sea por el cambio climático o porque estamos en la estación calurosa por antonomasia, sucesivas olas de calor han provocado un aumento de las temperaturas que han tenido graves repercusiones en la salud de las personas. De hecho, en los días más calurosos, se calcula que han muerto más de 1.000 personas en todo el Estado español. Por este motivo, las autoridades han recalcado la importancia de tomar una serie de precauciones para evitar golpes de calor.
Entre los consejos se encuentra una correcta hidratación, sobre todo en personas mayores y en niños, que son los que más pueden sufrir las consecuencias. Asociamos la deshidratación a tener sed, pero lo cierto es que se puede manifestar de diferentes maneras, algunas de ellas muy desconocidas para la población, como es el caso de las siguientes. Por eso, vamos a ver algunas de las más sorprendentes.
Sentir hambre
Cuando el organismo está deshidratado, lo manifiesta. Los alimentos son una fuente de agua, sobre todo algunos como la fruta, por lo que un aumento del apetito puede significar en el fondo que lo que necesitamos es agua. Por eso muchas personas asumen que tienen hambre cuando comienzan a sentirse débiles y cansadas. Pero es más difícil hidratarse a través de la comida, por lo que se aconseja tomar agua primero en periodos como ahora de altas temperaturas.
Mal aliento
Una de los primeros sistemas que se ven afectados por el calor y la deshidratación es la producción de saliva. Esto se traduce en un aumento de las bacterias bucales y el mal aliento. Por eso, cuando en ocasiones se acude al médico por esta condición, una de las recomendaciones es beber más agua.
Mal humor
El mal humor puede ser causado por una mala hidratación, como recoge este estudio publicado en The Journal Nutrition. En él, los expertos analizaron a un grupo de mujeres jóvenes que presentaban deshidratación y mostraron más signos de ira, depresión, molestia y frustración que las mujeres que beben suficiente agua.
Niebla cerebral y pálpitos
El cerebro de una persona puede verse afectado por la deshidratación. Las personas levemente deshidratadas tienen un peor desempeño en las tareas cognitivas y sienten una mayor incapacidad para tomar decisiones. La caída de los niveles de agua podría disminuir la cantidad de líquido que rodea el cerebro en el cráneo, produciendo consecuencias como la sensación de pálpitos.