En ocasiones, nuestro cuerpo padece un déficit vitamínico a causa de una mala alimentación o debido a ciertos tipos de enfermedades como la anemia. Los multivitamínicos son suplementos dietéticos que te aportan vitaminas y minerales necesarios para tu salud. Veamos qué son y cómo deben consumirse. 

Qué son los multivitamínicos

Un multivitamínico es un producto en formato cápsula, polvo o líquido compuesto de vitaminas, minerales y otros nutrientes. Por lo general, estos suplementos son indicados para casos especiales en los que existe un déficit de vitaminas en el cuerpo. Pero, ¿cómo sabemos que nuestro cuerpo está padeciendo dicha carencia? Estas son las señales de que necesitas vitaminas:

  • Fatiga.
  • Debilidad. 
  • Caída del cabello. 
  • Uñas débiles.
  • Mala cicatrización.
  • Llagas en la boca. 
  • Erupciones cutáneas de color rojo. 
  • Hormigueo en las extremidades. 
  • Calambres. 

Existen diferentes clases de multivitamínicos en el mercado dependiendo de su concentración de ingredientes. En este sentido, es importante que sepas que todas las vitaminas que necesita el cuerpo humano se encuentran en los alimentos de forma natural. No obstante, hay personas con determinadas alergias, intolerancias, enfermedades y situaciones especiales que necesitan consumir este tipo de suplementos. 

Los multivitamínicos son uno de los suplementos más consumidos hoy día

Ventajas de los suplementos vitamínicos

Lo cierto es que los multivitamínicos son uno de los suplementos más consumidos hoy día. Especialmente, para equilibrar las carencias de las dietas, así como para compensar los grandes esfuerzos (entrenamientos) que conllevan un gasto energético importante. Los micronutrientes fundamentales para un deportista son las vitaminas del grupo B, así como las vitaminas A, C, D y E. 

Vitaminas
Vitaminas

Estos son los beneficios de tomar suplementos vitamínicos:

  • Mejoran el rendimiento.
  • Reducen la sensación de fatiga.
  • Acortan los periodos de recuperación. 
  • Aceleran el metabolismo.
  • Favorecen la formación de enzimas, cuyo papel es enviar los impulsos entre los nervios y los músculos. 
  • Protegen el sistema inmunitario evitando infecciones. 
  • Ayudan a la asimilación de minerales como el hierro, el calcio y el fósforo. 
  • Refuerzan los huesos y los músculos. 
  • Actúan como perfectos antioxidantes frenando la acción de los radicales libres. 
  • Mantienen la hidratación del cuerpo y su correcto equilibrio electrolítico. 

¿Por qué los deportistas deben tomar multivitamínicos?

Las personas con un alto rendimiento físico deben asegurar una correcta ingesta de vitaminas y minerales. Los deportistas han de completar su dieta con este tipo de suplementos dietéticos, ya que su desgaste físico es mucho mayor que el de una persona normal. Por otro lado, para poder tener una adecuada recuperación y reparación de los tejidos los deportistas necesitan de un aporte extra de vitaminas. Asimismo, el sudor es una de las vías por la que más vitaminas y minerales se pierden. Finalmente, has de saber que una persona que practica deporte de manera intensa tiene una mayor aporte calórico. En este sentido, las vitaminas también son necesarias para que el cuerpo pueda procesar esta cantidad de alimentos. 

Cómo tomar multivitamínicos

Los expertos acuerdan que el mejor momento para tomar este suplemento de vitaminas es por la mañana. Concretamente, dentro de los primeros 30 minutos tras el desayuno. Esta es la mejor manera de aprovechar todas sus propiedades. Además, vitaminas con la B12 y la C tienen propiedades estimulantes por lo que se desaconseja su ingesta por la noche. 

Para evitar riesgos por hipervitaminosis es importante consultar antes con un nutricionista. Él sabrá qué tipo y cantidad de vitaminas necesitamos según nuestra dieta y cantidad de esfuerzo físico diario. Si tomas suplementos por tu cuenta y sin seguir las recomendaciones de los fabricantes es posible que padezcas los siguientes síntomas:

  • Estreñimiento o diarrea. 
  • Cálculos renales. 
  • Problemas en el ritmo cardíaco.
  • Problemas digestivos. 
  • Náuseas. 
  • Formación de coágulos en la sangre. 
  • Visión borrosa.