El chocolate es un alimento tan apetecible como calórico y tan rico como azucarado. Para hacernos una idea, 100 gramos de chocolate aportan unas 500 calorías. Esto se debe a su alto contenido de grasas y, también, de azúcares, ya que el chocolate se obtiene al mezclar cacao en polvo y azúcar pulverizada de manteca de cacao. Pese a que las cantidades de un ingrediente y otro pueden variar, debe tener como mínimo un 35% de componentes del cacao. Pero el chocolate, por su sabor, su composición y su consumo, protagoniza diversos mitos y dudas. 

Mitos y realidades del chocolate

1. ¿El chocolate es un estimulante o calma la ansiedad?

Más allá de la interesante relación entre las emociones y la alimentación, el cacao contiene, por una parte, una cantidad importante de azúcar y grasas, a la que se atribuye la sensación placentera tras su ingesta.

Por otra parte, los compuestos que se consideran estimulantes del sistema nervioso, como la cafeína y la teobromina, pueden ser los responsables de la sensación estimulante del chocolate, capaz de mejorar el estado anímico de quien lo ha consumido. Sin embargo, este efecto ha sido estudiado por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y Nutrición (EFSA), que ha establecido que no existe relación de causa-efecto y que, por lo tanto, no hay investigaciones que corroboren este mito en la actualidad.

choco

Podemos tomar chocolate de distintas formas

2. ¿Engorda el chocolate?

No hay alimento, por sí solo, que sea el causante directo del aumento de peso. Realmente, las causas del exceso de peso son muy complejas, y la obesidad es un problema derivado de muchos factores en el que en la mayoría de ocasiones existe una predisposición genética sobre la cual determinados factores ambientales y culturales favorecen su aparición. Sin embargo, se acepta que el incremento de peso es debido, en muchos casos, a un desequilibrio entre la ingesta y el gasto energético.

El exceso de calorías consumidas y que no son gastadas se acumula en forma de grasa en el organismo. En este marco, el chocolate, por el hecho de ser un alimento de alta densidad energética, debe considerarse como un alimento a tomar con moderación. Sin embargo, será el cómputo total de energía consumida a lo largo del día (provenga o no del chocolate) el causante, o no, del aumento de peso. Un dietista nos podrá ayudar a determinar qué cantidad podemos tomar al día o a la semana.

3. Chocolates y granos

El nexo entre la alimentación y el acné es un tema que despierta un gran interés, y de entre los alimentos más nombrados están el chocolate, los lácteos y los alimentos grasos. Los estudios indican que un porcentaje muy elevado de la población relaciona la ingesta de determinados alimentos, como el chocolate, con la aparición de granos en la piel. Pese a ello, en base a la evidencia científica actual, no existen pruebas concluyentes sobre el hecho de que los alimentos en general, y el chocolate en particular, sean el causante o agraven el acné.