La inflamación tiene muchas causas, entre ellas la forma en que el cuerpo responde a la infección. Son cinco signos principales que caracterizan esta respuesta: dolor, calor, enrojecimiento, hinchazón y pérdida de función. Sin embargo, en algunos casos, es posible que no haya ningún síntoma de inflamación.

Qué es la inflamación

La inflamación es un proceso complejo que involucra una variedad de células y proteínas de señalización que protegen al cuerpo de infecciones y sustancias extrañas, como bacterias y virus. La inflamación ayuda al cuerpo a producir glóbulos blancos, que el cuerpo necesita para combatir infecciones.

A veces, el sistema inmunitario desencadena una respuesta inflamatoria de manera inapropiada. Este es el caso de las enfermedades autoinmunes. El cuerpo lo compensa atacando sus propios tejidos sanos, actuando como si estuvieran infectados o fueran anormales.

Cuando comienza el proceso de inflamación, las sustancias químicas de los glóbulos blancos se liberan en la sangre y los tejidos afectados para proteger el cuerpo. Los químicos aumentan el flujo de sangre a las áreas del cuerpo infectadas o lesionadas, causando enrojecimiento y calor.

Estos productos químicos también pueden provocar la fuga de líquidos a los tejidos, lo que puede provocar hinchazón. Este proceso protector también puede estimular nervios y tejidos, causando dolor.

Causas básicas de la inflamación

Las causas de la inflamación son numerosas, pero pueden clasificarse en términos generales en tres.

Biológicas, como infecciones, enfermedades y respuestas inmunes anormales. Químicas, como venenos, toxinas y alcohol. Y físicas, como lesiones, quemaduras, congelación o exposición a la radiación. La inflamación de cualquier tipo puede ser aguda o crónica.

Inflamación aguda

La inflamación aguda puede incluir calor (a veces por fiebre) o calor en el área afectada.

La inflamación aguda es una función saludable y necesaria que ayuda al cuerpo a atacar las bacterias y otras sustancias extrañas en el cuerpo. Una vez que el cuerpo se ha curado, la inflamación disminuye.

Algunas condiciones que causan inflamación aguda son la bronquitis aguda, una uña encarnada infectada, un dolor de garganta relacionado con la gripe, la dermatitis, un trauma físico, una sinusitis y cortes en la piel.

Dolor en la mano por inflamación / Unsplash
Dolor en la mano por inflamación / Unsplash

Inflamación crónica

La inflamación crónica, por otra parte, puede continuar atacando áreas sanas si no se reduce. Puede que no sea tan visible como la inflamación aguda y puede ser provocada por artritis inflamatoria, asma, periodontitis y enfermedad inflamatoria intestinal.

Los cinco signos de inflamación

Los cinco signos principales de inflamación son lo suficientemente comunes como para poder detectarlos de inmediato. Pueden diferir en los órganos que afectan, pero los signos de inflamación en el corazón y en otras partes del cuerpo tienen mucho en común.

  • Dolor

Tanto en la inflamación aguda como en la crónica, el dolor es el resultado de sustancias químicas inflamatorias que estimulan las terminaciones nerviosas, lo que hace que las áreas afectadas se sientan más sensibles.

La inflamación puede causar dolor en las articulaciones y los músculos. Cuando la inflamación es crónica, una persona experimentará altos niveles de sensibilidad al dolor y rigidez. Las áreas inflamadas pueden ser sensibles al tacto.

  • Calor

Cuando las áreas inflamadas del cuerpo se sienten calientes, es porque hay más flujo de sangre en esas áreas.

Las personas con condiciones artríticas pueden tener articulaciones inflamadas que se sienten calientes al tacto. Sin embargo, es posible que la piel alrededor de esas articulaciones no tenga el mismo calor. La inflamación de todo el cuerpo puede causar fiebre como resultado de la respuesta inflamatoria cuando alguien tiene una enfermedad o infección.

  • Enrojecimiento

Las áreas inflamadas del cuerpo pueden verse rojas porque los vasos sanguíneos de las áreas inflamadas se llenan con más sangre de lo habitual.

  • Hinchazón

La hinchazón o edema es común cuando una parte del cuerpo está inflamada. Es el resultado de la acumulación de líquido en los tejidos, ya sea en todo el cuerpo o en el área afectada.

La hinchazón puede ocurrir sin inflamación, especialmente con lesiones.

  • Pérdida de función     

La inflamación puede causar la pérdida de la función relacionada con lesiones y enfermedades. Por ejemplo, es posible que una articulación inflamada no se mueva correctamente o que una infección respiratoria que cause signos de inflamación en los pulmones dificulte la respiración.