La dieta FODMAP consiste en reducir los carbohidratos de cadena corta y los polioles fermentables, un tipo de alcohol, durante un corto periodo de tiempo en sujetos con afectaciones concretas. Esta dieta se ha visto eficaz para pacientes con alteraciones intestinales como las que presenta el síndrome del intestino irritable.

El proceso consistirá en eliminar todos los alimentos ricos en los componentes ya citados, que son una larga lista entre los que encontramos frutas, verduras o cereales, para posteriormente ir introduciendolos poco a poco para saber cuáles en concreto son los que producen daño y debemos eliminar.

Este proceso consta de distintas fases y se tiene que realizar bajo la recomendación y supervisión médica ya que la pérdida de nutrientes por la eliminación de una gran cantidad de alimentos es alta y si no se hace de manera adecuada y se mantiene indefinidamente en el tiempo puede dañar la microbiota intestinal. 

Dieta FODMAP
Dieta FODMAP

¿Para qué sirve la dieta FODMAP?

Se ha visto que los alimentos que contienen FODMAP no son malos y para la mayoría de la población son beneficiosos ya que ayudan al incremento de las bacterias sanas en el intestino. Es por esta razón que antes de empezar con esta dieta debes consultar con un médico o un nutricionista para que evalúe tu estado.

Una dieta con muchos estudios detrás

Así pues, aunque se presenten algunos síntomas como abdomen hinchado, diarrea o algún otro tipo de dolor estomacal, la solución no siempre será reducir los carbohidratos, antes deberemos valorar si hay una patología que los genere y cuál es.

Las patologías que han obtenido buenos resultados en distintas investigaciones realizando esta dieta son el síndrome del intestino irritable o enfermedades con inflamación intestinal como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn. Siendo la primera, el síndrome del intestino irritable, la que cuenta con más estudios. En estos pacientes se ha observado que la dieta rica en FODMAP no se absorbe bien en el intestino delgado produciendo un exceso de agua y gases que acabarán por producir los síntomas típicos de este síndrome como son la diarrea o el dolor e hinchazón abdominal.

Pese al beneficio que genera esta dieta en algunos casos, como hemos dicho siempre la deberemos realizar por recomendación médica, ya que con ella eliminamos una gran cantidad de alimentos que son ricos en nutrientes, por esta razón se tiene que realizar un control para que el sujeto siga teniendo una adecuada alimentación.

En definitiva, una dieta que ya cuenta con varios estudios, y recomendada en algunos casos como los que hemos mencionado anteriormente.