Ya en la Grecia clásica, se encuentran textos en los que se habla de los beneficios de la terapia equina, como un medio para mejorar la salud mental. En Estados Unidos se creó en 1969 el primer centro especializado en este tipo de terapia de una forma oficial. Consiste en cuidar y pasar tiempo con los caballos bajo la guía de un profesional de la salud mental. No se requiere ninguna experiencia previa con un caballo, ni saber montar. Se puede realizar a través de actividades como acariciar, acicalar, alimentar o guiar a los caballos, o incluso simplemente observarlos.

Tal y como recoge este estudio de la Universidad Florida Atlantic estas actividades aumentan la autoconciencia y la percepción personal, promueven la atención plena, alivian los sentimientos de ansiedad, miedo o estrés y la depresión.

Qué es la terapia equina, cuidar caballos para reducir la ansiedad

Pero, ¿qué sentido tienen estas actividades pasando tiempo con los caballos y observando sus comportamientos? Lo cierto es que los actos de aseo básicos y repetitivos promueven sentimientos de calma. Por ejemplo, simplemente guiar al caballo es una herramienta para ayudar a aliviar la ansiedad. Alimentar y cuidarlo, ayuda a establecer vínculos, en especial en el caso de personas que tienen que abordar problemas de confianza o traumas. Como la terapia es asistida por un profesional, generalmente durante estas actividades se aprovecha para realizar preguntas, explorar sentimientos incómodos o ideas que vayan surgiendo durante la experiencia.

En general, los beneficios terapéuticos que ofrecen los animales están más que demostrados y los caballos no son una excepción. Son animales inteligentes y muy sociales que utilizan una serie de sonidos y un lenguaje corporal para interactuar con el resto de animales y que pueden comunicarse con los humanos de manera similar. De hecho, como queda recogido en este estudio llevado a cabo en la Universidad de Tours en Francia, su capacidad para reconocer y responder a las emociones humanas les da un papel único en el proceso de la terapia.

Trabajar con caballos puede ayudar a abordar los síntomas de ansiedad de varias maneras. Pueden fomentar la regulación de las emociones, porque debido a que son animales de presa son capaces de captar los estados emocionales de los demás y ayudan a aprender a regularse y comunicarse con los demás de manera más efectiva.

Hombre lavando a un caballo / Unsplash
Hombre lavando a un caballo / Unsplash

Los beneficios de la equinoterapia o terapia equina

La equinoterapia enseña a comunicarse con los caballos de manera efectiva. Es natural sentirse un poco vulnerable con un animal tan grande, pero son animales muy sociales y receptivos. Cuando se respetan sus límites y se responde a sus señales de comportamiento, se puede construir una relación de confianza y cooperación. Saber que uno puede relacionarse con éxito con un animal tan grande puede aumentar la confianza en uno mismo y ayudar a sentirse más cómodo en situaciones cotidianas que inspiran miedo y preocupación. También es útil para desarrollar habilidades de atención plena, porque interactuar con un caballo requiere atención y concentración.

Por un lado, hay que observar lo que hace el caballo y prestar atención a lo que uno hace para asegurarse de no asustarlo o molestarlo. Este estado de atención plena promueve la aceptación y ayuda a reflexionar sobre los sentimientos, comportamientos e interacciones con otras personas.