La posición para dormir juega un papel importante en la calidad de su sueño. A veces, experimentamos ciertos dolores musculares debido a una mala postura y, aunque parece algo completamente involuntario, lo cierto es que cambiar la posición de una forma predeterminada puede ayudarnos a que se produzca un cambio una vez estemos profundamente dormidos.

Una persona puede entrenarse gradualmente para dormir en una nueva posición. Al principio puede resultar algo incómodo, pero con el tiempo se traduce en un cambio. Estas son las diferentes posturas y sus beneficios e inconvenientes.

Posición fetal

La posición fetal consiste en dormir de lado con las piernas dobladas hacia el cuerpo. Es la posición para dormir más popular, y por una buena razón. No solo es excelente para el dolor de espalda o el embarazo, sino que dormir en posición fetal también puede ayudar a reducir los ronquidos.

Aun así, dormir en posición fetal tiene algunas desventajas. Debe ser una postura relativamente relajada con las piernas lo más extendidas que se pueda o con una almohada entre las rodillas. De lo contrario, podría limitar la respiración profunda. Tampoco es adecuada si se tiene algún problema como dolor o rigidez en las articulaciones.

De lado

Dormir de lado es similar a dormir en posición fetal, pero las piernas no se doblan hacia el cuerpo. Al igual que la posición fetal, dormir de lado es una buena posición. Además de reducir los ronquidos, es excelente para la digestión e incluso puede reducir la acidez estomacal.

Los mayores inconvenientes son que puede causar rigidez en los hombros y en la mandíbula. Poner una almohada entre la parte inferior de las piernas ayudará a alinear mejor las caderas para evitar el dolor lumbar. Dormir sobre el lado izquierdo también puede ser útil para estimular las deposiciones regulares, porque el intestino delgado mueve los desechos al intestino grueso a través la válvula ileocecal, que se encuentra en la parte inferior derecha del abdomen.

Mujer durmiendo de ladoAcostado sobre el estómago

Es una de las peores posiciones. Su único beneficio es que puede evitar los ronquidos. Pero, por lo demás, puede causar dolor de cuello y espalda. También agrega mucha tensión innecesaria a músculos y articulaciones, por lo que es posible que la persona se despierte dolorida y cansada.

Boca arriba

Dormir boca arriba ofrece la mayoría de los beneficios para la salud. Protege la columna vertebral y también puede ayudar a aliviar el dolor de cadera y rodilla. Es bueno para reducir cualquier presión innecesaria sobre la espalda o las articulaciones. Los beneficios son mayores si se coloca una almohada debajo de las rodillas, ya que sostiene la curva natural de la espalda.

El mayor inconveniente es para las personas que experimentan ronquidos o apnea del sueño por la presión sobre el abdomen, sobre todo, en las personas obesas.