El deporte es fuente de salud y eso lo sabemos, pero a veces no tenemos claro todo lo que puede hacer por nosotros. Pasar de ser una persona sedentaria a una activa que hace deporte no es fácil, pero los múltiples beneficios que esto conlleva nos pueden ayudar a decidirnos.
Vamos a ver cuáles son los beneficios de realizar deporte cada semana. Además, hay muchos deportes diferentes que se pueden realizar para adaptarse al estilo de vida y a la actividad de cada persona, por lo que no tenemos excusa.
Beneficios en aspectos muy distintos
Mejora tu circulación
Uno de los beneficios de realizar cualquier tipo de deporte es que mejora la circulación sanguínea. Esto hace que nuestro cuerpo reciba irrigación y también nos ayuda a evitar problemas como la celulitis o las varices y las arañas vasculares. La circulación puede tener otras consecuencias si no funciona bien, como la de crear trombos que pongan en peligro nuestra salud. De ahí que sea uno de los beneficios más buscados en el deporte, ya que nos ayuda a evitar la sensación de piernas pesadas.
Evitar la obesidad
La obesidad y el sobrepeso son dos problemas que afectan a un alto porcentaje de la población. Hacer ejercicio es una de las mejores formas de evitar la obesidad y la subida de peso, ya que quemamos las calorías que ingerimos en caso de llevar una dieta equilibrada. La obesidad está unida a muchísimos problemas de salud, desde infarto a problemas circulatorios y respiratorios, de ahí que sea tan importante evitarla.
Mejora la capacidad pulmonar
El ejercicio aeróbico mejora la capacidad pulmonar cuando entrenamos. De ahí que notemos que con el tiempo nos esforzamos menos, ya que nuestros pulmones estarán mucho más fuertes. Es bueno para cualquier persona, ya que en caso de tener que realizar cualquier esfuerzo no sentiremos la sensación de ahogo que sí podemos tener si no realizamos ningún ejercicio.
Fortalece el corazón
Cualquier tipo de ejercicio físico, aunque sea moderado, fortalece nuestro corazón. El ejercicio mejora la circulación y al mismo tiempo hace que el corazón trabaje, de forma que en reposo las pulsaciones son menores para adaptarnos al esfuerzo cuando sea necesario. Realizar actividades físicas de forma habitual hace que el riesgo de padecer un infarto se reduzcan mucho. De ahí que se recomiende tanto a todas las edades y teniendo en cuenta el estado de cada persona.
Reduce la depresión
El ejercicio no solo nos lleva a tener un cuerpo sano, sino también una mente sana. Realizar deporte hace que generemos endorfinas, las hormonas de la felicidad. Es una buena forma de evitar tener depresión, ya que nos ayuda a mejorar el estado de ánimo. La depresión hace que no deseemos hacer nada, pero si hacemos el esfuerzo de comenzar a realizar ejercicio moderado, notaremos cómo nos llenamos de energía positiva que nos va a ayudar a seguir adelante.
Aumenta la fuerza muscular
Los músculos necesitan ser entrenados y el ejercicio es fundamental para ello. Cuanto más músculo creamos más calorías quemamos en reposo. Es por eso que también se recomienda realizar ejercicios de fuerza con pesos o con el propio peso corporal. Este tipo de ejercicios nos ayudan a mantener la masa muscular, algo muy importante con el paso de los años. Además, está comprobado que realizar estos ejercicios ayuda a combatir problemas óseos como la osteoporosis.