La Síndica de Greuges de Barcelona, Maria Assumpció Vilà, ha alertado de la "falta de transparencia" en la gestión de servicios funerarios en la ciudad, así como "de irregularidades" en la prestación por parte de Cementerios de Barcelona SA.

En la presentación del informe anual correspondiente al 2018, Vilà ha denunciado que no se informe suficientemente a los ciudadanos sobre qué servicios son obligatorios y qué voluntarios y que no se especifique qué implica cada uno de ellos.

Vilà ha pedido al ayuntamiento que elabore un informe que especifique las tasas de cementerios que sea "útil para la ciudadanía". El informe, según la Síndica, se tendría que hacer público en sede electrónica para "garantizar la transparencia de la información pública".

422 expedientes en la mesa de emergencia

Por otra parte, la Síndica ha remarcado que la dificultad para acceder a una vivienda es una de las cuestiones que más preocupa a los ciudadanos. Vilà ha denunciado que algunas personas no han recibido las notificaciones para acceder a una vivienda de protección social y que 422 personas están en la mesa de emergencia esperando a uno.

La Síndica ha denunciado que unas 3.000 personas "malviven" en las calles de Barcelona. Ha precisado que un millar duermen en la calle y unas 2.000 lo hacen en albergues. En este sentido, ha señalado que está ultimando una actuación de oficio para valorar la eficacia del modelo municipal de atención a las personas sin hogar.

La Sindicatura recibe 1.729 quejas en 2018

La Sindicatura de Agravios de Barcelona ha recibido 1.729 quejas el año 2018, la mayoría referentes a cuestiones relacionadas con el medio ambiente. El año pasado la Sindicatura ha hecho 3.604 actuaciones, de las cuales 1.729 han sido quejas y 1.875 asesoramientos y consultas generales. Del total de quejas, 866 han acabado en resolución de la defensora. En 840 ocasiones se ha hecho un asesoramiento tecnicojurídico y en 23 se ha hecho una actuación de oficio.

La Sindicatura ha recibido quejas sobre diferentes cuestiones. Los barceloneses han denunciado el ruido de los camiones de las basuras por la noche, pero también la imposibilidad de disponer de un título provisional mientras se obtiene la nueva T-16, así como las dificultades para adaptarse a la nueva red ortogonal de autobuses.

Los problemas que generan los narcopisos en el Raval, la venta ambulante no autorizada, la falta de garantías para atender a los menores no acompañados, las difcultats en la accesibilidad en la ciudad o la falta de lavabos públicos son algunas de las cuestiones que más han denunciado a los vecinos el año 2018.