El Govern de la Generalitat tendrá una segunda sede institucional en el Palau de Pedralbes, además del Palau de la plaza de Sant Jaume. El ejecutivo ha previsto una rehabilitación integral del edificio, con una inversión de 28 millones de euros destinada a resolver las deficiencias y la degradación que sufre, y aprovechará la intervención para redefinir los usos del espacio con el objetivo de convertirlo en esta nueva sede oficial. Actualmente, el Palau de Pedralbes pertenece a la Generalitat de Catalunya, después de que el Ayuntamiento de Barcelona cediera la propiedad de manera gratuita en un proceso iniciado con un acuerdo en 2004 y hecho efectivo en febrero de 2022. Desde entonces, la Generalitat lo ha utilizado como espacio representativo y centro de relaciones institucionales, pero su estado de degradación ha limitado los usos del edificio. El calendario prevé una ejecución por fases, con inicio en 2028 y la finalización total de las obras en verano de 2030.

Rehabilitación integral y nuevos usos

Según informa la ACN, el Govern se ha fijado como objetivo rehabilitar completamente el edificio ante la degradación acumulada de una infraestructura que nunca ha sido objeto de una reforma de gran alcance. El Palau presenta problemas de humedades, especialmente en el sótano, así como grietas y deficiencias estructurales tanto en el exterior como en el interior. La secretaria general de la Presidència, Eva Giménez, ha explicado que es necesaria una rehabilitación integral para “ponerlo en condiciones” y ha remarcado que el uso institucional del Palau será compatible con la celebración de actos internacionales y culturales. La reforma incluirá la reparación de todas las deficiencias, la reordenación de espacios interiores y la creación de nuevas comunicaciones verticales entre plantas, así como una mejora de la eficiencia energética del edificio.

 

Con la reordenación, la planta baja tendrá los espacios de representación, con salas para grandes actos y espacios para reuniones, la biblioteca, la sala de Armas, la cocina y la capilla del Palau. La primera planta será la noble institucional, donde estará el despacho del presidente de la Generalitat, un espacio de acogida de autoridades y zonas para los diferentes departamentos. La segunda planta tendrá, por un lado, oficinas administrativas y salas de reuniones y, por otro, un espacio para la Unión por el Mediterráneo (UpM), que actualmente ya tiene su oficina en el edificio. El último piso, más pequeño, será el residencial y tendrá habitaciones para invitados institucionales. La planta del sótano se destinará a las instalaciones y servicios, con salas técnicas, almacenes y vestuarios. En cuanto a los jardines, la intervención solo afectará a la parte de uso privado del Palau, y no a la globalidad del parque público.

Concurso para los proyectos arquitectónicos

El Govern abrirá este lunes el concurso público para presentar proyectos de rehabilitación y de adecuación funcional. El concurso tiene un presupuesto de 2,3 millones de euros, que incluye la contratación del equipo ganador para elaborar el diseño final y dirigir las obras, así como una compensación de 5.000 euros para los tres proyectos finalistas. El jurado estará integrado por tres miembros del Departamento de la Presidencia (un presidente y dos vocales), dos vocales del Departamento de Cultura, uno del Ayuntamiento de Barcelona, y hasta tres representantes designados por el Colegio de Arquitectos de Cataluña.

Calendario de ejecución

La previsión es que el concurso de ideas se resuelva en la primavera de 2026 y que las obras comiencen en el verano de 2028. El proyecto se desarrollará por fases, de modo que el Palau continuará parcialmente operativo durante la reforma. La planta noble podría entrar en funcionamiento a finales de 2029, mientras que la finalización completa de las obras está prevista para el verano de 2030. La primera fase incluirá la renovación integral de todas las cubiertas, seguida de la impermeabilización del sótano y la rehabilitación de las fachadas. Paralelamente, se irá interviniendo en el interior de las diferentes plantas, hasta completar la transformación del edificio.