Cuando el año 2014, durante el mandato de Xavier Trias como alcalde, se culminó el derribo de la anilla o tambor vial de la plaza de les Glòries Catalanes de Barcelona, nada hacía sospechar que este espacio de centralidad soñado por Ildefons Cerdà estaría en obras por un periodo superior a una década. Aunque el derribo era el primer paso para la construcción de unos túneles para la circulación y la posterior urbanización de la superficie, inicialmente se creía que los pasos subterráneos estarían en servicio en 2017, pero las obras no se dieron por terminadas hasta cinco años más tarde, en 2022, de manera que el gran parque de Glòries, la enésima y quizás definitiva reconversión de la plaza, iniciada en 2019 con la mitad montaña, no se podrá dar por culminada hasta el próximo sábado, 26 de abril, cuando se inaugure la mitad mar.
Tal como informó el Ayuntamiento de Barcelona el pasado 13 de abril, el día 26 se procederá a la inauguración del nueve y ya completo Parc de les Glòries, con la abertura a la ciudadanía de la mitad mar, que no se había podido afrontar hasta la entrada en servicio de los túneles, con una jornada festiva que incluirá espectáculos musicales, talleres y actividades para toda la familia. En cifras, el nuevo espacio consta de 4,3 hectáreas con más de 9.000 metros cuadrados de verde, un gran paseo y varios espacios singulares que completarán un parque de 9 hectáreas, 30.000 metros cuadrados de verde y más de 1.000 árboles.

A una semana de la inauguración, ElNacional.cat ha querido hacer un recorrido para comprobar, sobre el terreno, cómo será el nuevo parque, una vez las obras están en su fase final, y hacer una primera cata de cómo será este gran parque del centro -cuando menos según Cerdà- de Barcelona. Pocos días antes de la abertura a la ciudadanía, los nuevos espacios ya han tomado su forma casi definitiva, aunque, como suele pasar, hay diferencias notables entre las recreaciones virtuales difundidas por el consistorio y la realidad, en especial con respecto a una vegetación que, en todo caso, ha sido afectada por el largo periodo de sequía que ahora justo acaba y que se podrá enderezar en el futuro.
La Rambla dels Encants: un paseo, de momento, con poca sombra
Empezamos este recorrido por la llamada Rambla dels Encants, es decir, el lateral de les Glòries del lado Llobregat que corresponde a la conexión de las calles de Cartagena y de Àlaba y que incluye el paso del tranvía en su prolongación hasta Verdaguer. Según el proyecto de reurbanización que el Ayuntamiento de Barcelona dio a conocer en junio de 2022, se trata de una avenida verde con mucha sombra que, en todo caso, llegará cuando los árboles plantados hayan crecido. Con todo, destacan de esta zona los detalles ornamentales del pavimento con sus formas sinuosas, además de sus espacios de estancia.


El Mirador a la Gran Via: el espectáculo son los coches
Antes de entrar a la plaza de les Glòries propiamente dicha, en el lado Llobregat de la Gran Via con acceso desde la Rambla dels Encants se ha situado un mirador, con gradas y espacio verde, sobre la entrada del túnel viario de la calle Castillejos. Aparte del problema del verde, en este caso hay que apuntar que el mirador, que teóricamente se tiene que dedicar a Montserrat Caballé y Freddie Mercury, para recordar su dúo con la canción 'Barcelona', tiene como principal aliciente ver los coches que entran y salen del túnel.

La estación intermodal: a pleno rendimiento
La reurbanización de les Glòries incluye una estación intermodal de bus, tranvía y Metro, que ya funciona a pleno rendimiento y que es uno de los grandes aciertos de la nueva reurbanización, ya que, por una parte, ha centralizado en un mismo punto las paradas de tranvía, eliminando las paradas de Encants y la Farinera, y de la otra ha situado a pocos metros de los andenes del Tram las paradas de autobús y de la estación de Metro de Glòries (L1). En este ámbito queda pendiente la apertura de un nuevo acceso del Metro en la zona inferior del Disseny Hub, que facilitará el uso para los vecinos de unas calles que quedan por debajo de la cota de la plaza de les Glòries.

El jardín de inmersión: tomar el Metro entre cactus
Ya en el marco del nuevo parque de Glòries, una parte que ya está en uso, a pesar de que pendiente de que entren en servicio las escaleras mecánicas, es el nuevo jardín de inmersión, que ha consistido en la reconversión del acceso de la estación de Metro de Glòries del medio de la plaza, que no era más que una boca de metro, en una zona de terrazas que conforman un singular jardín de cactus con una superficie total de 1.292 m². El espacio incluye un mirador y, aun ser una intervención bastante sorprendente y que se ajusta a las previsiones iniciales, se le ha criticado que no sea accesible para personas con movilidad reducida, que solo podrán ver los cactus desde arriba.


Ejes verdes: la traza de la Diagonal y la Meridiana
El centro de toda esta nueva zona verde está enmarcada por dos viales que recorren el trazado de la Diagonal y la Meridiana y que configuran en su intersección el centro de la Barcelona que diseñó Cerdà. Adicionalmente, hay un tercer camino, más sinuoso, que une la calle de Ribes con el del Clot y que recuerda el camino histórico que partía de la muralla romana y conducía hasta Montcada, y que prácticamente sigue existiendo en la actualidad en su integridad. Finalmente, un cuarto camino recorre el trazado de la Gran Via. En todo caso, estos paseos sufren el mismo mal que el resto del parque, la falta actual de verde. Además, en el paseo que mantiene el trazado de la Diagonal hay situadas dos fuentes ornamentales con láminas de agua de 177 m² y 100 m² de superficie que no se podrán valorar hasta que no estén llenas y en funcionamiento.



Monumento al Meridiano: monumento restituido
La nueva urbanización de les Glòries supone también la recuperación del monumento al Meridiano, situado, por razones obvias, sobre el trazado de la avenida Meridiana. Este monumento, de 40 metros de longitud, reproduce a escala el perfil orográfico del territorio que va de Dunkerque a Barcelona, en recuerdo de los trabajos de medición del Meridiano entre las dos ciudades. Fue instalado en les Glòries el 1992. Afectado por las obras, fue retirado de su emplazamiento en 2014 a otro sector de la Meridiana, de donde también tuvo que ser retirado en 2018 en el marco de la reurbanización de esta avenida, y finalmente, ahora ha sido restituido en un espacio central de la Meridiana.

Àgora Berta Cáceres: esperando a los bambúes gigantes
La nueva plaza de les Glòries cuenta con varias zonas verdes y también un área para perros, pero lo más interesante son los puntos singulares, uno de los cuales será el Àgora Berta Cáceres. Está planificado como un espacio de 1.000 m² útiles de uso polivalente donde se podrán realizar acontecimientos culturales de todo tipo. Esta ágora sensorial está rodeada de bambúes gigantes, aunque de momento, habrá que esperar a qué crezcan. En todo caso, el espacio está dedicado a la activista indígena hondureña Berta Isabel Cáceres Flores, asesinada el año 2016 cuando lideraba una campaña contra la construcción de una presa en Honduras.


Node Dinàmic: el gran espacio para juegos infantiles
En otro ámbito de la plaza se situará el Node Dinàmic, una superárea de juego, con 35 elementos de juego, un arenal y zonas de estancia, todo ello accesible y organizado a partir de dos anillas elevadas, con una superficie total de 1.968 m², que estará complementado por un nodo fresco, previsto como un parque de agua para el público infantil de 104 m², en funcionamiento durante los meses de verano. Pocos días antes de la inauguración, las dos anillas blancas del Node Dinàmic ya destacan en la nueva configuración de la plaza, con operarios dando los últimos retoques a una zona que concentrará la actividad infantil.



El Umbracle: la gran zona en la sombra
Otro espacio singular de la nueva plaza de les Glòries es el Umbracle, un espacio polivalente de 668 m² de superficie diseñado para llevar a cabo actividades y actos diversos en la sombra. Su estructura, configurada como una inmensa marquesina de color blanco, permitirá hacer todo tipo de actividades culturales y ciudadanas al cobijo. También se trata de un sector donde estos días se acaban de ultimar los detalles, pero que cuando esté a pleno rendimiento promete ser uno de los principales espacios de actividad de la plaza, convirtiéndose en la otra cara de la moneda de la Gran Clariana -situada en la mitad norte de la plaza- para los días de lluvia.

La Gran Via en el lado Besòs: el gran fleco pendiente
Esta visita al parque de les Glòries finaliza en la Gran Via en el lado Besòs, porque aquí está el gran fleco pendiente de todo el conjunto, ya que a pesar de no formar parte de la plaza, tiene relación con ella. En este ámbito todavía se trabaja en la reurbanización entre las calles Badajoz-Independència -que son la misma con dos nombres diferentes- y la de Bilbao, es decir, por donde transcurre el túnel viario. Después de una etapa de urbanismo táctico, ahora se trabaja en la urbanización definitiva, con la previsión de finalizarla la primavera de 2026, aunque se podría alargar, ya que está previsto liberar parte del espacio del trazado del tranvía con un controvertido nuevo tramo en zigzag por la calle de la Ciutat de Granada. En todo caso, en este tramo de la Gran Via las obras no se detienen.
