Seis playas de Barcelona han tenido que cerrar sus accesos para evitar que aumente la concentración de personas. Según lo Ayuntamiento de Barcelona, las playas de Sant Martí, Nova Icària, Bogatell, Mar Bella, Llevant y Sant Miquel han restringido la entrada por las aglomeraciones de gente y para garantizar que se puede seguir manteniendo la distancia de seguridad establecida para evitar contagios.

A lo largo del día la Guardia Urbana ha hecho controles de acceso en el espacio para que no se superara el aforo y ha ido dejando entrar bañistas a medida que han ido saliendo. Sin embargo, finalmente se han tenido que cerrar accesos para que no se pueda concentrar a más personas.

Por otra parte, según el Ayuntamiento todas las playas de Barcelona presentan una ocupación muy alta, a excepción de la de Somorrostro.

Desde el lunes 8 de junio el consistorio barcelonés regula el aforo a playas con controles en los puntos de acceso. Además, se ha establecido un sistema de 'semáforos' por cada playa que se puede consultar en la web del Ayuntamiento y que indica si el nivel de aforo es bajo, medio, alto o muy alto.

En el primer fin de semana de la fase de reanudación, la Guardia Urbana insiste en la importancia de mantener la distancia de seguridad una vez esté en la arena de la playa. En demás, el cuerpo policial, pide que se respeten las señalizaciones y facilita un mapa para consultar la ocupación, en tiempo real, de cada playa.

El fin de semana pasado, coincidiendo con el primero de la fase 2, el Ayuntamiento de la capital catalana tuvo que cerrar, también, las playas de Nova Icària y Bogatell, Llevant y Mar Bella para superar el 80% de la ocupación permitida.