El Bloc Tarragona es el nombre de guerra del edificio situado en el número 84-90 de esta calle del Eixample de Barcelona. Se trata de un gran edificio de 120 pisos de alquiler sometido a la presión de los pisos turísticos, ya que actualmente hay más de 30 en funcionamiento y la previsión de la propiedad es la de conseguir que todos acaben teniendo esta función de alojamiento por días para turistas, con la intención de echar a los más de 80 vecinos que siguen residiendo allí. Por eso mismo, este bloc ha sido el catalizador de una lucha vecinal que ahora asume el recientemente constituido Sindicat d'Habitatge Socialista de Catalunya (SHSC), que este martes, y ante la puerta de entrada de este edificio, ha anunciado el inicio de una campaña que aglutina en la misma demanda hasta 6 bloques en diferentes puntos de Barcelona con la misma problemática que el Bloc Tarragona.

El mismo sindicato, presentado el pasado mes de mayo como la unión de varios sindicatos de inquilinas locales, ha dado el pistoletazo de salida a la campaña 'Expropiemos los pisos turísticos' para denunciar que la vivienda "no puede ser al mismo tiempo derecho y mercancía", según ha señalado la portavoz de la organización, Marina Parés, que ha cargado contra el "lobby turístico" por la conversión de vivienda en pisos turísticos, que degenera en un "infierno de convivencia" para los vecinos, que a menudo se ven obligados "a marcharse al extrarradio". Por eso mismo, el SHSC ha conseguido que blocs similares de los distritos de Ciutat Vella y el Eixample sumen esfuerzos por reivindicar sus derechos, aunque no se ha anunciado, de momento, ninguna medida concreta.

"¿Dónde voy yo con 82 años?"

Enrique, uno de los vecinos afectados del Bloc Tarragona, ha intervenido en la rueda de prensa para relatar su experiencia personal pero compartida con muchos vecinos ante la situación, ya que ha recordado que en su edificio han tenido que pasar una larga época de obras para acomodar los pisos al nuevo uso y después la situación con los turistas ocupando pisos. "Hemos tenido peleas, gritos, fiestas y en una ocasión los Mossos d'Esquadra tuvieron que venir porque había hasta 24 personas en un piso", ha apuntado el vecino, que ha señalado que la intención de la propiedad es la "de conseguir que se marchen los vecinos", para lanzar la pregunta: "¿Dónde voy yo con 82 años?"

En este contexto, el SHSC ha reclamado de la administración la paralización en la adjudicación de todas las licencias turísticas, la revocación de las licencias turísticas ya adjudicadas para que se destinen a vivienda habitual y la renovación de todos los contratos de alquiler de las personas residentes en los bloques afectados. "Necesitamos una sociedad que garantice un acceso a la vivienda universal, en la que la prioridad sea satisfacer con calidad las necesidades humanas. Solo la expropiación de todos los pisos turísticos y su control como clase trabajadora garantizará que su uso deje de responder al negocio turístico", ha señalado la portavoz del sindicato.