La entrada en servicio de la actual fase de pruebas de la T-Mobilitat no pudo empezar peor. Una fuga de información dejó al descubierto datos personales de centenares de usuarios, cosa que comportó que la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM), decidiera cerrar la web de registro cuando todavía no habían pasado ni veinticuatro horas desde su puesta en servicio. Todo aquel desbarajuste, que ha comportado tantos problemas que incluso los trabajadores de los puntos TMB han convocado una huelga de protesta, quedará sólo en una simple amonestación, ya que es la única respuesta prevista por la Autoridad Catalana de Protección de Datos (APDCAT) cuando la infracción corresponde a ficheros de titularidad pública.

Aixi lo ha avanzado este jueves el medio 'Crónica global', que cita un escrito del APDCAT donde se especifica que las responsabilidades por el escape de datos personales no irán más allá de una amonestación. Según el medio citado, poco después de detectarse el escape de datos, el diputado del Parlament Jordi Terrades (PSC-Units) presentó una batería de preguntas que han sido respondidas por la APDCAT, que ha señalado que, "en el caso que la ATM pueda ser sancionada por la violación de seguridad sufrida en su portal, el marco jurídico de aplicación no ha contemplado, al tratarse de un consorcio integrado por Administraciones públicas, que esta sanción pueda ser económica, sino que tiene que consistir en una amonestación".

Huelga en los puntos TMB

Precisamente, los errores de la implementación de la T-Mobilitat, en especial la filtración de datos de usuarios comportó cambios en el sistema de conseguirla, que ya de entrada era complicado, y en la mayoría de casos ha obligado al usuario a acudir de forma presencial a un punto de información TMB y también el aumento de las incidencias derivadas de su uso -dificultades en la recarga a distancia, por ejemplo- comportó un aumento casi exponencial de las visitas de los clientes a los puntos de información, cosa que derivó en una sobrecarga de trabajo, razón por la cual los trabajadores de los puntos de atención de TMB, con una plantilla de una cincuentena de personas, se prepara para hacer paradas parciales en protesta todos los lunes a partir del 31 de enero.

Según avanzó 'betevé' el miércoles, las paradas previstas serán de 9.30 a 12.30 h y de 17 a 20 h y el objetivo será denunciar la sobrecarga de trabajo en los cuatro puntos de información de la red del metro, situados a las estaciones de Universitat, Diagonal, la Sagrera y la Sagrada Família. De hecho, los trabajadores han señalado que el pasado diciembre, en un momento álgido de difusión de contagios por la variante omicron de la covid, las bajas llegaron hasta el 60% de la plantilla, y, así y todo, no se organizó ninguna sustitución.