Un total de 22 entidades defensoras de los animales de Barcelona miembros del Consejo Municipal de Convivencia, Defensa y Protección de los Animales han decidido tomarse "un tiempo de reflexión" y no asistir a la reunión ordinaria de este Consejo convocada por|para este lunes. En un comunicado enviado al secretario y al resto de miembros, las entidades expresan su "profundo malestar por el mal funcionamiento y la deriva del Consejo de los últimos años". En el escrito explican que, "lejos de mantenerse como un órgano de participación ciudadana donde sus miembros, de demostrada y consolidada experiencia en la defensa de los animales, realizan funciones de asesoramiento, el Consejo se ha convertido en un escaparate donde el Ayuntamiento habla y el resto de miembros escuchan". Entre las entidades firmantes del manifiesto está laADDA, Depana, Fundació Altarriba o Plataforma ZooXXI.

La no asistencia a esta reunión se produce después de que una mayoría de entidades hayan pedido la dimisión de su presidenta, Laia Bonet, tercera teniente de alcaldía, y que esta petición no hubiera tenido "ningún tipo de respuesta ni de reflexión para entender el malestar de las entidades". Las entidades no disponemos de tiempo y espacio reales para hablar, debatir, llegar a conclusiones y tomar acuerdos, los grupos de trabajo ya no tienen el apoyo real del Ayuntamiento; se ha llegado a una situación límite", lamentan. "Las entidades nos sentimos abandonadas, menospreciadas y sin posibilidad de participación real", aseguran.

Así, ante los "continuos agravios que atentan contra los fundamentos de este órgano de participación, base de su propia existencia, las entidades instan a una profunda reflexión por parte de todo el mundo". De esta manera se quiere devolver el Consejo Municipal de Convivencia, Defensa y Protección de los Animales a los miembros que lo conforman, a fin de que puedan seguir desarrollando con normalidad su tarea de asesoramiento de las políticas públicas de protección animal de Barcelona.

La última decisión de Bonet

El Ayuntamiento de Barcelona pondrá en marcha un centenar más de espacios para llevar perros desatados en la ciudad a partir de septiembre. Serán zonas de uso compartido (ZUC), como plazas o jardines, donde se permitirá hacerlo en ciertas franjas horarias. Estas 103 zonas se sumarán a las 116 áreas reservadas para perros que ya existen. Así, ha explicado la teniente de alcaldía Laia Bonet, prácticamente todo el mundo que tiene un perro tendrá a menos de diez minutos de casa un espacio para pasearlo sin correa. Aparte, a partir de diciembre del año que viene entrará en vigor el régimen sancionador, que multará a los dueños que lleven el perro desatado fuera de estos espacios, ya que los animales tendrán que ir atados por la calle excepto en los espacios establecidos.

Todo tiene que ver con la Ordenanza de Protección, Tenencia y Venta de Animales (OPTVA), una normativa que fue aprobada en el 2014, pero que todavía tenía medidas sin desplegar. De hecho, la ordenanza ya preveía el régimen sancionador, pero hasta ahora había una moratoria que permitía que los perros fueran desatados por todas partes si no se indicaba lo contrario. Es decir, hoy por hoy es sancionable llevar al perro sin ligar, por ejemplo, por un parque donde se explicita en un cartel la obligación de llevarlo atado, sin embargo, por el contrario está permitido hacerlo en la calle o en cualquier otro espacio si no se dice lo contrario. Dentro de un año ya no será así.