La CUP-Capgigrem Barcelona ha presentado hoy una propuesta para municipalizar el turismo barcelonés. Después de proponer la expropiación de la Catedral de Barcelona, los cuperos vuelven a las andadas con una campaña en la que piden poner los bienes turísticos en manos de la ciudadanía en un proceso que incluye poner el sector turístico en manos del Ayuntamiento de la capital catalana.

Para conseguir este objetivo, los cuperos han presentado en el Ayuntamiento de Barcelona la campaña Els mites del turisme. El portavoz del partido anticapitalista en el consistorio, Quim Serra, ha explicado que desde la CUP se pretende "desmontar las falacias y mitos" que ahora mismo sirven, según los cuperos, "para justificar el actual modelo turístico".

Medidas para el turismo

Entre las medidas que pretenden realizar para que se municipalice el sector turístico hay cuestiones tan importantes como el control de los salarios de los trabajadores del sector en Barcelona o la regulación de los precios del alquiler para evitar una especulación inmobiliaria.

Además, la CUP opta por hacer que los albergues y locales turísticos pasen a ser gestionados por el Ayuntamiento de Barcelona.

Verano crítico

Desde la CUP, consideran que Barcelona se encuentra ahora mismo ante un "verano crítico" por lo se refiere a la llegada de turistas a la capital catalana. Los cuperos se unen a las reivindicaciones vecinales de barrios como la Barceloneta, que han denunciado reiteradamente la afluencia de turistas extranjeros con actitudes claramente incívicas: sexo en el espacio público, aumento de la basura y la suciedad, micciones en plena calle, entre otros lamentables episodios. A todo esto, la CUP le llama "precariedad vecinal".

Para mostrar hasta qué punto el Ayuntamiento no se aleja del modelo turístico actual, la concejala Maria Rovira ha mostrado un cartel de las fiestas de la Mercè de este año, en el que aparecen dibujos de cruceros y la estatua de Colón. Para la CUP, estas ilustraciones son todo aquello que pretenden "combatir".