El Park Güell es una de las obras de Antoni Gaudí más visitadas de Barcelona, un hecho que, dada la ubicación del parque en una zona alejada del centro de la ciudad, comporta externalidades negativas para los vecinos de los barrios adyacentes, pero que, a su vez, supone una importante fuente de ingresos para las arcas del Ayuntamiento, ya que el Park Güell combina los dos papeles, el de reclamo turístico de primer orden con la calificación de parque municipal. Todo ello hace que este espacio sea uno de los puntos de Barcelona donde hay más masificación turística y donde se centran los esfuerzos para reducir este impacto.

En este marco, la presidenta del grupo municipal de Esquerra Republicana en el Ayuntamiento de Barcelona, Elisenda Alamany, ha anunciado este lunes por la tarde, justo delante de la puerta del Park Güell en la carretera del Carmel, el cierre de un acuerdo con el gobierno municipal del PSC para reducir, de cara a final de mandato, en medio millón los visitantes anuales de este conocido espacio gaudianiano que, además, tiene la calificación de patrimonio mundial por parte de la Unesco. Se calcula que los visitantes anuales en la actualidad ascienden casi a cuatro millones y medio al año y el compromiso es, pues, rebajarlos hasta los cuatro millones de cara a mediados de 2027.

“El parque ha dejado de ser de los barceloneses y barcelonesas a causa de la masificación turística”, ha dicho Alamany, que considera que la afluencia turística “impide que los vecinos se lo hagan suyo”. Por eso ha anunciado una “medida indispensable” para “recuperar el parque”. Así, la reducción de medio millón de visitantes al año, un 11% de los visitantes actuales, supondrá una reducción de 1.365 turistas menos al día y unos 130 menos por hora. La medida acordada por ambos partidos se llevará, en todo caso, a la próxima Comisión de Economía, pero los republicanos dan por hecho que se cumplirá este compromiso con el gobierno municipal de Jaume Collboni.

Sin fecha de inicio

Esta reducción, en todo caso, aún no tiene fecha precisa de inicio, pero para Alamany, lo importante no es el momento concreto en que se empiece a practicar el acuerdo sino el hecho de que “cuando acabe el mandato estemos en cuatro millones de visitantes”, con la reducción anunciada del medio millón. La misma líder de los republicanos en Barcelona ha señalado que esta cifra la consideran “asumible para este mandato”. Asimismo, Alamany ha reclamado al gobierno municipal el refuerzo de las líneas de autobús urbano que suben hasta el Park Güell, a menudo colapsadas por la alta afluencia de turistas con destino al Park Güell.