La compañía Aguas de Barcelona (Agbar) y la plataforma Alianza contra la Pobreza Energética (APE) han acordado iniciar una mediación para resolver el conflicto que tienen abierto a los tribunales y han pedido a través de un escrito que se posponga el juicio, previsto para el 16 de mayo.

Agbar denunció a tres activistas del movimiento social por la ocupación de las oficinas de la empresa el pasado 27 de febrero. Una cincuentena de personas entraron en las instalaciones de Agbar y estuvieron más de 10 horas para exigir la condonación de la deuda de cinco familias en situación vulnerable.

La empresa suministradora está condonando la deuda relacionada con el consumo de agua a familias vulnerables desde el momento en que dejaron de pagar el recibo y hasta que los servicios sociales del ayuntamiento de Barcelona les declaró como familia vulnerable.

Sin embargo, el recibo del agua contiene otros conceptos (tasas e impuestos) que suponen la mitad del importe y que no dependen de Aigües de Barcelona sino de las administraciones competentes: ayuntamiento de Barcelona y/o Àrea Metropolitana de Barcelona.

Canales de comunicación

El objetivo de esta mediación es, según Agbar, poder potenciar los canales de comunicación con la APE, a fin de que la entidad se pueda dirigir a la compañía de aguas cuando tengan algún caso de alguna familia en situación de vulnerabilidad y evitar así que, tanto los trabajadores de la oficina de clientes de la calle de Consell de Cent de Barcelona, como los clientes y vecinos "tengan que ver importunada su actividad diaria".

La APE ha atribuido la decisión de Agbar a "la presión que ha recibido por parte de la opinión pública" porque las "prácticas" de la empresa habían quedado en "entredicho". El movimiento social ha afirmado en un comunicado que participarán en "el espacio de diálogo" porque "siempre" han estado abiertos a hablar "sobre todo aquello que afecta las familias en situación de vulnerabilidad y la garantía de los suministros básicos".