Pablo Motos es como el calvo de la Lotería: reparte dinero por Navidad. Desde hace meses, 'El Hormiguero' sortea cada semana entre la audiencia una tarjeta de crédito con miles de euros. La mecánica del concurso es sencilla. El presentador llama a un teléfono cualquiera y hace una pregunta: "¿Sabe usted qué es lo que quiero?". Si al otro lado de la línea responden "la tarjeta de El Hormiguero", se llevan el bote. Anoche, 3.000 euros. Y ahora que se acercan las Fiestas, algunos espectadores necesitan el premio más que nunca.

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Después de una llamada fallida, Motos y Quique San Francisco, el invitado del programa de ayer, contactaron con José de Oliva, en el País Valencià. Cuando oyó la pregunta, se lo pensó unos segundos. Pero acabó dando la respuesta correcta. Alegría en el plató y en casa de José, que empezó a llorar emocionado: "Me hace mucha falta. Me habéis alegrado el día". El ganador de los 3.000 euros explicó que tiene problemas económicos y que necesitaba el dinero: "Soy muy pobre. Me habéis alegrado las Navidades. Dios os bendiga".

La nota discordante, la reacción lamentable de San Francisco: "Deja de mamonear", le espetó a José mientras celebraba el premio. Una reacción deplorable de la que el presentador no sabía como salir: "Que venga alguien y me dé un tiro en la pierna", acabó pidiendo Motos, irónico.