El ex de Kylie Jenner, Travis Scott, ha protagonizado una nueva polémica, debido a un ataque de ira contra un desconocido al que le pegó un puñetazo en la cara mientras se encontraba en un reconocido local nocturno de la ciudad de Nueva York, informaron las fuentes policiales al portal ‘Page Six’. Además, revelaron que el rapero provocó 12.000 dólares (unos 11.300 euros al cambio) en daños a su equipo de trabajo.
De acuerdo con el citado medio, la policía atendió una llamada desde la famosa discoteca Nebula, ubicada en el Midtown de Nueva York, en la que se afirmaba que el famoso rapero había protagonizado una fuerte discusión con un ingeniero de sonido del lugar. Durante el transcurso de la llamada se le explicó a la policía que rápidamente la discusión había trascendido y ya no solo era un altercado verbal, sino que se había vuelto algo físico. Y aunque la víctima no presentaba lesiones notables en el rostro, la policía tomó sus declaraciones y la de otros testigos que habían presenciado la agresión por parte de Scott.
Según se ha dado a conocer, el padre de los hijos de Kylie Jenner había tenido un fuerte episodio de ira incontrolable en el local, por lo que destruyó una pantalla de vídeo y uno de los altavoces de la discoteca antes de huir del local en un coche que no pudo ser identificado. Asimismo, ‘Page Six’ informó que por el momento Travis Scott no ha sido arrestado por el incidente, pero ya se ha presentado una denuncia en su contra que está siendo analizada por el equipo legal de Scott. “Si bien esto es claramente un malentendido que se ha exagerado por el clickbait y la desinformación, estamos trabajando de manera activa con el local y la policía para resolverlo y dejar el tema zanjado”, indicó el abogado del rapero, Mitchell Schuster. Además, indicó que las redes sociales habían sacado todo “fuera de proporción”, por lo que está confiado de que Travis “será absuelto de cualquier irregularidad”.
Travis Scott causó estragos en una discoteca al ingresar en estado de ebriedad
Aunque el abogado de Scott afirmó que todo se trataba de un “malentendido”, lo cierto es que un testigo que se encontraba en el local afirmó que el rapero “entró enojado y borracho y progresivamente se fue volviendo más y más loco (…) Su camiseta decía: ‘Retrocede de una p**a vez [Back the fuck up]. Es como si estuviera listo para la batalla. Era un presagio”, indicó el informante. De hecho, esa misma frase es la que le dijo Scott a uno de los técnicos con los que discutió esa noche, según se puede escuchar en un vídeo que se ha filtrado. Asimismo, otra fuente asegura que el técnico de sonido bajó el volumen del altavoz porque estaba “al máximo y distorsionado” y fue en ese momento cuando Travis “se acercó al técnico de sonido y le gritó con mucha agresividad en la cara por haber bajado el sonido. Y luego le pegó el puñetazo en la cara”, recordó.