Últimamente (y desafortunadamente, porque nos deja con ganas de más), a la magnífica actriz Anabel Alonso solo la veíamos yendo de vez en cuando en Masterchef, casi siempre acompañada de su inseparable Bibiana Fernández, 'Los retales', como se hacen llamar ellas dos en el talent culinario de TVE. Ahora, sin embargo, los espectadores volverán a disfrutarla encima de un escenario con la obra La mujer rota, un monólogo basado en un texto de Simone de Beauvoir. Un papel, el de 'Murielle', donde la dirige la argentina Heidi Steinhardt, y que puede verse en el Teatro Infanta Isabel de Madrid hasta el 18 de noviembre.
La de Barakaldo lleva toda su carrera profesional haciendo reír al personal. Eminentemente cómica, esta actriz y presentadora lleva el humor en la sangre, y lo ha demostrado sobradamente en muchos programas y series (El club del chiste, Me resbala, Tu cara me suena, Liarla Pardo, Pasapalabra, Los ladrones van a la oficina, Hermanas 7 vidas, Aída, La que se avecina, Amar es para siempre y tantas y tantas otras), o doblando a la icónica 'Dory' de Buscando a Nemo. Pero hay cosas que la sacan de quicio y que no la hacen reír, sino más bien, todo lo contrario. Cosas y especialmente, personas, que la indignan. Por lo que hacen y por lo que dicen. Y en las españas hay muchos de estos. Pero Alonso tiene la sana virtud de llamar a las cosas por su nombre.
A raíz del estreno de su nueva obra la han entrevistado en el diario Público, y vale mucho la pena leer lo que dice, por ejemplo, de Isabel Díaz Ayuso y de muchos otros temas. Una de las conclusiones de su monólogo es que cuando una mujer "deja de ser esposa y madre, desaparece o es descartada por la sociedad" y le preguntan si a pesar de los avances del feminismo, "¿el machismo ha comenzado a usar nuevas máscaras?" y si "¿Cree que el 8M y el Me Too ha provocado una reacción ultra?", y ella tiene claro que "los ultras consideran que las mujeres estamos en contra de los hombres o que queremos quitarles sus derechos". Y un nombre propio se ha puesto sobre la mesa, tocando otra cuestión, el de la presidenta de los madrileños. Una Isabel Díaz Ayuso que "desobedece la ley, rechaza crear el registro de médicos objetores en la Comunidad de Madrid y asocia el aborto a la depresión, el suicidio o el consumo de drogas: 'Váyanse a otro lado a abortar'", dice el mencionado medio.
¿Qué dice Anabel Alonso?: "Además de terrible, es una mentira. Y que una presidenta autonómica no cumpla la ley me parece una aberración. Sin embargo, no pasa nada. Su impunidad es bestial y no ponerle coto a sus desmanes, un gran error". No se puede decir de manera más clara. Anabel Alonso, una vez más, sin pelos en la lengua.