Alexéi Stoliarov, uno de los humoristas rusos, que hizo una broma política a la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha manifestado al programa Versió RAC1, que su impresión es que "no es muy lista". "Se lo creyó del todo", ha añadido.

Según Stoliarov, Cospedal estaba muy interesada en la información de que había un 50% de espías rusos en Barcelona, "pero le importaba todavía más saber si Puigdemont era un espía del KGB". "No hay duda de que se lo creyó todo", ha insistido.

El humorista ha confirmado que el presidente español, Mariano Rajoy, quería reunirse con ellos, después de que Cospedal le informara. "Después de la primera conversación, pasaron 15 minutos y nos volvió a llamar. Y nos dijo que había hablado con el primer ministro, que le había transmitido la información y que estaba muy interesado en vernos en persona al cabo de tres días," ha apuntado.

Stoliarov ha explicado cómo contactaron para hablar con la ministra. "Nos pusimos en contacto con su oficina de protocolo y pactamos una hora para llamarnos y hablar. Nos llevó un día de trabajo. Su oficina quería saber quiénes éramos y dijimos que éramos de la oficina del ministro de Defensa de Letonia y nos creyeron. Hablamos unas cinco veces con ellos durante el día", ha dicho.

También intentaron hacer la broma con Rajoy y con el president Carles Puigdemont, pero en este caso la llamada no prosperó.