En el todavía incipiente e incierto mercado del hidrógeno verde, solución energética para alargar la vida y el alcance de las renovables, la start-up catalana Jolt asegura tener una solución revolucionaria para mejorar la eficiencia de los electrolizadores que la crean y cada vez convence a más actores de que así es. El último en subirse a esta apuesta impulsada por científicos que llevan años investigando es el Banco Santander, que aportará 1,5 millones de euros de financiación, según ha podido saber ON ECONOMIA a través de fuentes oficiales de la empresa y del banco. Con ellos, completa un total de 7,8 millones en rondas de financiación a los que suma el préstamo de la Generalitat de 1,5 millones, músculo necesario para inaugurar su planta de electrodos, con capacidad para 4 GW, en L'Hospitalet de Llobregat el próximo mes de abril. 

"Tener al Santander como inversor no solo nos ayuda con la expansión internacional, sino que también proveerá a nuestros consumidores de la confianza que necesitan de que Jolt será un proveedor local, estable y a largo plazo de electrodos, células y servicios activados (reciclaje al final de la vida útil, piezas de recambio, reparaciones, mejoras de rendimiento, desarrollo de catalizadores y revestimientos)", explica Leon Rizzi, CEO de la start-up, con sede en Tarragona al amparo del Institut Català d'Investigació Química (ICIQ). El descubrimiento del químico y cofundador de la empresa, Alberto Bucci, de que con un recubrimiento de pintura industrial los catalizadores tienen una mayor duración y funciona mejor, es el origen de su nacimiento. 

 

 

"El nuevo inversor es importante por dos razones: como nueva empresa con nueva tecnología, tener este banco detrás nos da la credibilidad de que sí, estaremos aquí dentro de 20 años y puedes confiar en nosotros como un proveedor de electrodos", aporta Rizzi, que como segunda razón apunta a los planes de "construir nuevas fábricas y que el nuevo socio nos ayude con nuestra expansión internacional, especialmente en el Norte de Europa, Latinoamérica y Norteamérica, donde rápidamente necesitaremos crear plantas de electrodos". 

La cadena del hidrógeno verde

El hidrógeno se consigue separando las moléculas de agua para obtener hidrógeno como vector energético a partir de descargas eléctricas y cuando estas descargas eléctricas proceden de energía renovable, entonces el hidrógeno es verde. Pero el coste es elevado al tener que utilizar electricidad permanentemente para obtener otro formato energético y se pierde una parte en el proceso. Es por eso que la eficiencia del electrolizador es una de las claves y Jolt se postula como una empresa que tiene la "fórmula de la Coca-Cola" para estos catalizadores. 

En abril del año pasado, obtuvieron una primera inversión de 350.000 euros, que fue ampliada con una ronda de 6 millones en la que participaron Ship2B Ventures, Climentum Capital y Axon Partners Club. A estas rondas se suma ahora Santander y también un préstamo de 1,5 millones de la Generalitat a través de Avançsa, empresa pública de promoción y localización industrial de Catalunya. 

La empresa, liderada por el CEO Leon Rizzi y con el químico Alberto Bucci, el ingeniero químico Arturo Vilavella y el también químico Julio Lloret como principales socios, espera facturar cinco millones el año que viene, cuando empiece a producir electrolizadores para plantas de hidrógeno de diferentes partes del mundo.  

Aunque desde Jolt reconocen que el futuro energético del hidrógeno verde aún está por definir, tan solo la posibilidad de que sustituya a los procesos de producción de amoníaco o del hidrógeno no verde producido hasta ahora le otorga ya un potencial de mercado importante. Con todo, la capacidad de España para producir energía eólica y fotovoltaica, y la dificultad para transportarla o almacenarla, lo convierte en un país con gran potencial para el hidrógeno verde, tal y como viene defendiendo el presidente Pedro Sánchez con sus estímulos a esta energía y el impulso al H2Med que permita transportarlo a Europa.

También empresas como Cepsa, Maersk, Enagás, Naturgy o Iberdrola han anunciado miles de millones de inversiones en hidrógeno verde en España, si bien todavía no está claro la demanda que tendrá y la investigación para mejorar su eficiencia y reducir sus costes no avanza al ritmo esperado. Para generar el hidrógeno verde, serán necesarios electrolizadores y catalizadores y ahí Jolt espera ser un puntal español e internacional en la cadena de suministro. Por el momento, rechaza hacerlo de manera exclusiva para alguna de las empresas.